A través de la Limosnería Apostólica del Vaticano iniciaron una campaña de invierno que este año irá en directo beneficio de los afectados por la guerra en Ucrania, donde el llamado del Santo Padre, El Papa Francisco invitó a los católicos a donar camisetas térmicas.
Esta campaña que durará un mes tiene como objetivo apoyar a la comunidad en Kiev, Ucrania a través del llamado del cardenal polaco a cargo de la institución, Konrad Krajewski, quien pidió ayer la donación de camisetas térmicas para enviarlas por vía terrestre al país afectado, «ante la situación de emergencia que están viviendo no sólo por la guerra, sino también por la falta de electricidad, de gas y al clima invernal», detalló.
La Limosnería Apostólica o Limosnero de Su Santidad, consolida con su actividad la preocupación y la cercanía del Papa como pastor de la Iglesia universal, hacia quienes viven en situación de miseria, marginación o pobreza, así como en caso de graves calamidades.
Bajo esa premisa la Limosnería Apostólica, es la institución que se encarga de realizar las obras de caridad en nombre del Papa, y es por ello que el cardenal Krajewski pidió hoy la donación de camisetas térmicas para poder enviarlas a Ucrania por vía terrestre.
Por intermedio de un escrito el purpurado detalló que “se les puede ayudar con el regalo de camisetas térmicas, que son adecuadas para mantener la temperatura corporal para hombres, mujeres o niños”. Situación que detalló: “la Limosnería Apostólica ya se está aprovisionando. Quienes lo deseen pueden sumarse a esta iniciativa comprando y trayendo las camisetas directamente a este dicasterio en el plazo de un mes, para que sean enviadas por camión a Kiev lo antes posible».
Así también recalcaron que el Vaticano, ha enviado en varias ocasiones material médico y de primera necesidad desde el inicio de la guerra e incluso el limosnero ha entregado a la población de Ucrania dos ambulancias, conduciendo personalmente los vehículos desde Roma. Cabe recordar que el pasado 17 de abril, el cardenal Krajewski y la delegación con la que viajaba se vieron envueltos en medio de tiroteos cuando se encontraban repartiendo alimentos y bienes de primera necesidad en la localidad de Zaporiyia, donde se estableció una nueva misión humanitaria encargada por el Santo Padre.
