Hasta el estadio Vila Belmiro llegó el presidente recién investido de Brasil, Lula da Silva, lugar donde se realizó la última ceremonia de despedida del exfutbolista “pelé”.
Luego de haber asumido la presidencia este domingo 1 de enero en la ciudad de Brasilia, Lula da Silva se trasladó hasta el estadio Vila Belmiro, en Santos para despedir a Pelé quien falleció el pasado jueves con 82 años tras la confirmación de un cáncer de colon en el año 2019.
El mandatario de 77 años, aficionado del futbol rindió un último homenaje a exfutbolista, a dos días de tomar el mando del país por tercera vez. Da Silva participo de los oficios religiosos acompañado de su esposa, donde esperaban familiares y amigos, instancia en que los seguidores de pelé transitaban por un costado de la carpa donde estaba el féretro.
El oficio que se realizó fue católico, presidido por un sacerdote, quien oró por el alma del exfutbolista, «nada sufra» y ponga rumbo a la «vida inmortal en el reino eterno», expresó y añadió, «Señor, dale felicidad, luz y paz», afirmó el padre. Da Silva, quien es fanático del Corinthians, fue uno de los últimos dar sus condolencias a los familiares y amigos del «rey del fútbol». El cortejo fúnebre, recorrerá las calles de Santos hasta llegar al cementerio donde será sepultado.
