La Municipalidad de Arica se está preparando con urgencia para abordar el problema ambiental recurrente del Río San José antes de la llegada del verano. En una comisión de concejo, se confirmó que se realizarán nuevas jornadas de limpieza, con el objetivo de anticipar una eventual bajada de caudal y evitar que la basura llegue a las playas. Los trabajos se enfocarán en la zona urbana y el interior del valle de Azapa.
En ese sentido, la comisión identificó los puntos más críticos en el valle, donde los agricultores desechan restos agrícolas, y en la zona urbana, especialmente bajo los puentes de Avenida Santa María y el de Tucapel. En estos ejes estratégicos se planifican jornadas de remoción de escombros, levantamiento de rucos y limpieza de basura, con el fin de mitigar el impacto ambiental.
En relación con ello, Orlando Vargas alcalde de Arica, enfatizó la urgencia de estas acciones, pero enfatizó que la solución real es frenar el origen del problema. «Hace poco sacamos 36 toneladas del río, y ahora volveremos a limpiarlo, pero creo que este es un mal de nunca acabar y como municipio tenemos que encontrar la forma en que ya no se pueda botar más basura”.
En esa misma línea y para lograr un cambio de conducta, el municipio presentará una ordenanza que busca sancionar a quienes saquen basura fuera de hora o la dejen en lugares no autorizados.
De este modo el jefe comunal, confirmó que las multas partirán desde las 3 UTM. El presidente de la comisión, Víctor Sepúlveda, hizo además un llamado a la ciudadanía a denunciar a quienes arrojen desechos, contando con el apoyo de Carabineros y el Ejército en el despliegue.
