Iniciamos este mes de julio e inevitablemente se nos viene a la mente la festividad en honor a nuestra Señora del Carmen de la Tirana, donde cada 16 de julio más de 15.000 peregrinos visitan el pueblo perteneciente a la comuna de Pozo Almonte, para agradecer y solicitar la intercesión de nuestra madre ante nuestro Señor.
En este sexto capítulo de “La tirana 2023 fe, devoción y tradición” el equipo de Vilas Radio quiere adentrarse desde los inicios de esta festividad, donde conoceremos un poco más sobre la mítica edificación del “Templo Antiguo”.
En ediciones anteriores pudimos ver la historia del del poblado en base a la princesa Ñusta, “La Tirana”, nombre que luego recibiría el mismo pueblo para identificar el sector.
Ahora, si bien no hay una claridad al 100% sobre la edificación el primer Santuario, evidencias dan cuenta que esta se habría construido cercanos al año 1765, donde el clérigo levantó una ermita en el lugar colocando la imagen de la Virgen, transformándolo así, rápidamente en un lugar de culto a la Madre del Señor por parte de los indígenas.
Algunos especialistas plantean la existencia de un culto precolombino, cuestión no demostrada. De cualquier forma, se convirtió en un lugar donde comenzó a desarrollarse y expresarse la fe en Jesucristo y en el amor a la Virgen.
¿PORQUÉ EL SANTUARIO CAMBIÓ DE LUGAR?
Años después y una vez que la festividad iba tomando mayor relevancia, en el siglo XVIII, se construyó ahí un templo de características andinas, el cual se derrumbó a causa de un fuerte sismo el 13 de agosto de 1866.
Posterior a ello, en 1872, con materiales conseguidos en las diversas oficinas salitreras, y siguiendo las características de la construcción de la pampa, se comenzó la edificación del actual templo a casi mil 1500 metros de distancias del lugar inicial.
Sin embargo, y en paralelo, fieles trataron de levantar nuevamente las ruinas de este, para seguir visitando a la “Virgen del Carmen”.
En 1879, debido a la guerra, los trabajos del nuevo templo se detuvieron, transformándose la estructura en un esporádico albergue para las tropas. En 1884 se continuó con la obra, la cual finalmente fue inaugurada el 16 de julio de 1886.
Por aquella época, la festividad adquirió un nuevo carácter con ocasión de la Guerra del Pacífico y la incorporación del territorio tarapaqueño a Chile. La fuerte migración de peones desde la zona central del país a los territorios salitreros le dio una dimensión más masiva, en la medida en que se convertía en un referente para la religiosidad de los obreros del salitre, enfrentados a un territorio absolutamente distinto a su lugar de origen.
VIGENCIA DEL TEMPLO ANTIGUO
La primera Iglesia representa el inicio de la evangelización a través del tiempo hasta llegar a la construcción de un templo con aportes de particulares, como Farias, calle que lleva su nombre, la familia Terrazas y trabajadores de las salitreras.
Hoy en día, el templo si bien ha recibido algunas restauraciones, sigue manteniendo la misma base de construcción, donde incluso, durante la festividad de la Virgen del Carmen, se siguen realizando eucaristías.
Este lugar pasó a ser un espacio más que simbólico para el peregrino, donde realmente uno se adentra en lo que se conoce como la “Pampa del Tamarugal”, sitio de origen y comienzos de una de las celebraciones religiosas más importantes de nuestro país.
