En localidades donde el tiempo avanza con otro ritmo y los trámites suelen significar horas de viaje, el Estado decidió moverse. No fue una promesa ni un anuncio a distancia: fue presencia concreta. Funcionarios del Instituto de Previsión Social (IPS) llegaron hasta Camiña, Moquella, Chapiquilta y las caletas del borde costero de Iquique, marcando un hito nacional al inaugurar los primeros Puntos de Atención en Terreno (PAT) de Chile.
La escena se repite desde ahora cada mes: mesas instaladas en sedes vecinales, carpetas abiertas, computadores encendidos y vecinos —en su mayoría adultos mayores— resolviendo trámites que antes exigían largos traslados hacia Iquique, Alto Hospicio o Pozo Almonte. La atención pública sale de la oficina y llega al territorio.
Una red que se despliega donde antes no llegaba
Desde 2023, el IPS definió una meta clara: ampliar la cobertura de ChileAtiende más allá de los centros urbanos. El desafío era concreto en Tarapacá, una región extensa, con comunas rurales y costeras donde la distancia se convierte en una barrera para acceder a derechos básicos.
En coordinación con la Unión Comunal de Camiña y las Juntas de Vecinos de Caleta Los Verdes, San Pedro de Chanavayita y San Marcos, el IPS Tarapacá dio forma a un modelo inédito: atención presencial mensual coincidente con las rutas de pago de pensiones y beneficios sociales. Así, donde llega el pago móvil, ahora también llega el servicio completo.
Atención directa, sin viajes ni intermediarios
Los nuevos Puntos de Atención en Terreno funcionan con equipos de funcionarios y funcionarias del IPS-ChileAtiende, quienes atienden consultas y realizan trámites en las propias localidades. No hay ventanillas improvisadas: hay orientación, información y resolución directa.
Gracias a esta iniciativa, las personas pueden postular a beneficios como la Pensión Garantizada Universal (PGU), solicitar subsidios de discapacidad, autorizar apoderados para cobro de beneficios, reconocer cargas familiares y acceder a más de 20 trámites previsionales y sociales, pensados para toda la familia.
Cobertura total en Tarapacá
Con la puesta en marcha de estos PAT, el IPS consolida su presencia en las siete comunas de la Región de Tarapacá. A las sucursales ChileAtiende de Iquique, Alto Hospicio, La Tirana y Pozo Almonte, y a los puntos virtuales de Pica, Huara y Colchane, se suman ahora Camiña y el borde costero de Iquique, cerrando una brecha histórica de acceso.
Autoridades destacan impacto social
El delegado presidencial provincial (s) del Tamarugal, Rodrigo Vargas Briones, calificó la iniciativa como un avance concreto en descentralización:
“Este es un hito que acerca el Estado a comunidades alejadas. Permite que adultos mayores y familias realicen trámites sin desplazarse largas distancias, mejorando su calidad de vida y el acceso efectivo a los beneficios de la Reforma de Pensiones”.
Desde la mirada comunitaria, Elizabeth Moya, presidenta de la Unión Comunal de Camiña, fue enfática:
“Para nuestra gente esto es un beneficio enorme. La mayoría recibe pensiones del IPS y ahora podrá informarse, consultar y tramitar sin salir de su localidad. Acerca los servicios públicos a quienes más lo necesitan”.
El seremi del Trabajo y Previsión Social, Ignacio Prieto Henríquez, subrayó el valor territorial del despliegue:
“Estas atenciones en Moquella, Camiña, Chapiquilta y las caletas del borde costero representan un Estado presente, que entiende la realidad de zonas apartadas”.
Un modelo que pone rostro al servicio público
Para el director regional del IPS-ChileAtiende, Mauricio Gibert, el éxito del modelo radica en el trabajo conjunto con las organizaciones sociales:
“Este sistema nace desde el territorio. Gracias a dirigentes vecinales logramos implementar un servicio que entrega soluciones reales, oportunas y cercanas”.
Cuando el Estado llega primero
En Tarapacá, la atención social ya no depende solo de la conectividad digital ni de la capacidad de viajar. Ahora depende de un calendario comunitario, de una sede vecinal abierta y de funcionarios que recorren caminos interiores y rutas costeras.
En Camiña y en las caletas de Iquique, el Estado dejó de ser un edificio lejano y se convirtió en una mesa, una silla y una respuesta directa. Y para cientos de personas, eso no es solo un trámite menos: es dignidad, acceso y presencia real.
