La cancha de arcilla parisina no se ha mostrado complaciente con los tenistas chilenos, pues tanto Jarry como Tabilo fueron despedidos del segundo Grand Slam del año en primera ronda.
NICOLÁS JARRY
El chileno, finalista en el Masters 1000 de Roma, poca oportunidad tuvo con su verdugo del ATP DE Santiago, Corentin Moutet, local que ha sido elevado por su país tras el triunfo.
En dos horas y 45 minutos de juego las parciales fueron de 6-2, 6-1, 3-6 y 6-0, lo que despidió a la primera raqueta nacional del Roland Garros.
El duelo no estuvo exento de polémicas, pues el parisino dijo recordar la bienvenida que le brindaron los chilenos en Santiago. “Espero que ustedes tengan ganas de mostrarle que esta vez nosotros estamos en casa. Estén listos y ruidosos. Esto es París”, publicó en sus redes sociales.
Sin embargo, en conversación con la Agencia EFE, Jarry indicó que tal como en Santiago “voy a ser un jugador respetuoso, mi trabajo es jugar al tenis. A mí me enseñaron que hay que tener buenos valores y lo cumplo. Sé que el público va a estar a su favor, así que intentaré concentrarme en lo que pase en la cancha y cuando le animen a él, yo me animaré a mí mismo”.
ALEJANDRO TABILO
El actual N°24 del mundo al fin debutó en Roland Garros, instancia en que compitió con Zizou Bergs, a penas el N°104 global, y se convirtió en una pesadilla que lo llevó a caer por 3-6, 7-6 (5), 6-2 y 6-2.
Luego de un retraso por las intensas lluvias, el chileno entró esperanzado y con un buen juego inicial, el que se fue desinflando conforme pasaban los minutos. ¿Su justificación? “Después de quebrar en el segundo set, no me empecé a sentir muy bien de la cabeza, el cuerpo entero… tenía demasiado dolor de cabeza. Tomé algunas pastillas para que se me quitara el dolor, pero no me funcionó hasta el final del partido, cuando me empecé a sentir un poco mejor”, detalló el tenista a ESPN.
¿QUÉ PASÓ CON NADAL?
Pues, por su parte, Rafael Nadal tampoco encontró cabida en Roland Garros y se despidió en la primera ronda, eso sí, ovacionado por la gente.
“No sé si será mi última vez acá. Hay un gran porcentaje de que no regrese, pero no puedo decir que es un 100%”, dijo el exnúmero uno del mundo.
El máximo ganador del torneo, con 14 títulos, dijo adiós ante Alexander Zverev, campeón de la Masters 1000 de Roma, con un 6-3, 7-6(5) y6-3 en poco más de tres horas de competencia.