El 2025 ha sido un verdadero torbellino para Everton de Viña del Mar, que no solo atraviesa un mal momento futbolístico, sino que ahora suma conflictos internos que agravan su presente. A los pobres resultados en la Liga de Primera y la eliminación temprana en Copa Sudamericana, se suma una fuerte tensión entre jugadores y directiva.
Según reportó La Tercera, el plantel auriazul estaría molesto por el incumplimiento en el pago de premios por la clasificación al torneo internacional. Tras finalizar séptimos en el Campeonato Nacional 2024, el club recibió 250 mil dólares de parte de Conmebol, de los cuales cada jugador recibiría 1.500 dólares, cifra que aún no ha sido abonada.
La dirigencia prometió pagar en cuotas, lo que fue mal recibido por los futbolistas. El punto más álgido del conflicto se vivió luego del empate ante Unión La Calera, cuando los jugadores impidieron el ingreso de los directivos al camarín, evidenciando la ruptura entre plantel y administración.
Con un clima enrarecido y sin técnico oficial tras la salida de Gustavo Leal, Everton enfrentará este viernes a Universidad Católica, en un duelo donde el foco estará tanto en la cancha como fuera de ella.
