El exdirector de la Policía de Investigaciones (PDI), Héctor Espinosa, fue declarado culpable de malversación de caudales públicos, lavado de activos y falsificación de instrumento público, tras comprobarse el desvío de $146 millones en fondos reservados durante su gestión entre 2015 y 2017. Su esposa, María Magdalena Neira, también fue condenada por lavado de activos.
En ese sentido, el 4° Tribunal Oral en lo Penal de Santiago estableció que Espinosa, quien lideró la PDI hasta 2021, utilizó parte de los recursos asignados a gastos reservados para depositarlos en sus cuentas personales y en las de su cónyuge. Con ese dinero, el matrimonio adquirió una vivienda en la comuna de Las Condes, la cual será comisada a favor del Fisco.
De este modo Miguel Ángel Orellana, fiscal jefe de Alta Complejidad Oriente, señaló que “la prueba presentada fue contundente y permitió acreditar la desviación de fondos públicos mediante operaciones bancarias y testimonios de exfuncionarios”.
Además, agregó que “el monto malversado asciende, al menos, a 146 millones de pesos, cifra respaldada tanto por peritajes financieros y bancarios como por declaraciones de quienes participaron en la tramitación de los gastos reservados”.
En relación con ello la Fiscalía Metropolitana Oriente solicitó una pena de 20 años de presidio y una multa de 215 UTM para Espinosa, mientras que para su esposa pidió 5 años de cárcel y una sanción de 200 UTM.
Ante ello, el fiscal Orellana concluyó que: “El fallo reafirma nuestro compromiso con la transparencia y el uso correcto de los recursos públicos”.
Finalmente, el tribunal fijó la lectura de sentencia para el 1 de diciembre a las 11:00 horas, momento en que se conocerán las penas definitivas. El caso cierra más de cuatro años de investigación, luego de que el Consejo de Defensa del Estado presentara una querella tras detectar depósitos irregulares en las cuentas del exdirector y su pareja.
