Por ser considerado un peligro para la seguridad de la sociedad, además de presentar riesgo de fuga, es que la Fiscalía solicitó la prisión preventiva de Tomás Antihuen, quien está siendo formalizado por su eventual participación en el triple homicidio de Carabineros registrado en 2024 en Cañete.
Hasta el momento se ha escuchado un crudo relato del crimen de los tres carabineros que fueron emboscados, ejecutados y quemados en Cañete el pasado 27 de abril, mientras se realiza la audiencia de formalización a Antihuen.
Cabe recordar que el imputado fue detenido el pasado viernes en una cabaña cerca del Lago Lleu Lleu. En su poder se encontró una subametralladora uzi que pertenecía a uno de los carabineros asesinados.
En el informe, remitido por el ente persecutor a las defensas y citado por el fiscal de Alta Complejidad, Carlos Bustos Muñoz, en la audiencia de este lunes-, se confirma que una vaina rotulada como C-1 coincide con evidencia levantada en el caso “CONCEPCIÓN-2024-485”. Es decir, el triple homicidio de los funcionarios de la policía verde oliva ocurrido en Cañete.
Según la investigación, los imputados emboscaron a los policías mientras estos últimos realizaban un control de medida cautelar al tío de los involucrados. Fue frente a ese domicilio donde los hermanos Antihuen bloquearon el portón para conseguir que las víctimas se bajaran de la cabina blindada. Fue allí que los emboscaron y los ejecutaron. Luego cargaron sus cuerpos en el pick-up de la camioneta policial, para dejarla cruzada en medio del camino entre Cañete y Tirúa, en el sector Quilaco Bajo, cercano al lugar más poblado de Antiquina. Allí le prendieron fuego al vehículo y le dispararon con el objetivo de simular el enfrentamiento.
Esa, sin embargo, no es la única prueba balística que vincula a los Antihuen con el homicidio. Cuando cayeron los hermanos de Tomás, Felipe (29) y Yeferson (19), a fines de julio del año pasado, los investigadores encontraron en las cercanías a los domicilios allanados, dos armas de servicio que le fueron sustraídos a los carabineros emboscados. Se trata de dos pistolas fiscales que se encontraban ocultas que también fueron utilizadas para simular el enfrentamiento y “para darles muerte a las víctimas”, sostuvo Bustos.
Con lo expuesto, la Fiscalía solicitó _se reitera_, la prisión preventiva del imputado, argumentando que hay antecedentes suficientes para dar por acreditados los delitos y su participación en los hechos descritos. Además, toma en consideración la pena de crimen que arriesga, el peligro para la seguridad de la sociedad y el peligro de fuga.
También se enfatizó en la existencia de un dolo homicida, ya que el imputado, junto a los otros acusados en esta causa, realizaron un plan para ejecutar a los tres efectivos.
