Tras una investigación que duró varios meses, la Fiscalía junto a personal del SEBV de Carabineros lograron detener a la banda completa que participó en el robo con homicidio frustrado que afectó a un joven de 20 años en Alto Hospicio, en septiembre del año pasado, a quien le dispararon para sustraerle el vehículo, dejándolo parapléjico.
La fiscal a cargo de la investigación Camila Albarracín explicó que los hechos ocurrieron el 15 de septiembre pasado, cuando alrededor de las 06:30 de la madrugada, los imputados -tres sujetos adultos entre 20 y 21 años y un adolescente, todos chilenos-, llegaron a la intersección de Avenida La Pampa con Calle Dos, en el sector de la población Raúl Rettig de la comuna de Alto Hospicio, lugar donde se encontraba la víctima al interior de su vehículo marca Mazda, modelo Demio.
ANTECEDENTES
En primera instancia dos de los imputados abordaron el vehículo y procedieron a intimidar a la víctima con elementos que impresionaban como armas de fuego. Como la víctima se resistió, la obligaron a descender del vehículo, apareciendo los otros dos imputados con armas de fuego, comenzando todos los imputados a golpearlo en diferentes partes del cuerpo, y en un momento, uno de los imputados le disparó por la espalda con el objetivo de darle muerte. La víctima cayó al suelo, aprovechando los imputados de golpearla y registrarla, sustrayéndole las especies que mantenía en su poder, como su teléfono celular y su billetera. Posteriormente, los imputados se subieron al vehículo de la víctima, huyendo del lugar.
Producto de lo anterior la víctima resultó con lesiones consistentes en una herida por disparo de arma de fuego sin orificio de salida en la zona lumbar derecha, de carácter grave, que le provocó la inmovilidad de ambas piernas
La fiscal Albarracín explicó las múltiples diligencias realizadas por el SEBV de Carabineros que permitieron identificar y detener inicialmente a tres de los imputados, en especial con los análisis de los registros de cámaras de seguridad, y luego, el día de ayer (jueves), detener al cuarto y último participante gracias los análisis telefónicos.
Los cuatro imputados quedaron privados de libertad, por considerarse la libertad de todos ellos un peligro para la seguridad de la sociedad, dada la gravedad del delito.
