Tan solo 24 horas alcanzó a estar retenido en La Paz, Bolivia, el exfrentista Pablo Muñoz Hoffman, el único de los protagonistas de la “fuga del siglo” que, hasta ahora, no había sido ubicado.
La determinación se dio luego de la presentación de un recurso que frenó su deportación hasta territorio nacional, pese a que en Chile se insistía en que sobre él pesaban una serie de requerimientos y a que las tratativas para traerlo de regreso ya se habían activado.
Cabe recordar que el exintegrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), fue detenido el lunes en las inmediaciones del Consulado de Chile en el vecino país.
Interpol Bolivia indicó que se aprestaba para su entrega a Chile, y la PDI señaló que ya estaba realizando gestiones con la finalidad de presentarlo ante el 34° Juzgado del Crimen de Santiago, en virtud de sus «órdenes de detención pendientes por Infracción a la Ley de Armas, Secuestro y fuga del territorio nacional».
Sin embargo, durante la tarde de ayer, se conoció que Bolivia comunicó al Gobierno de Chile que, para el traslado, iba a ser necesario iniciar un proceso formal de extradición. Pocas horas después, se supo que el exguerrillero había presentado un recurso que frenó su deportación, y quedado libre y sin medidas cautelares.
Asimismo, obtuvo un salvoconducto que le permite ingresar a territorio chileno de manera regular durante los próximos 10 días.
De esta forma, de acuerdo con antecedentes reportados por el Poder Judicial, el juez remitió la mencionada solicitud junto con una orden de detención provisional a la Dirección de Asuntos Internacionales y Derechos Humanos de la Corte Suprema.
Este miércoles, en tanto, ambos documentos serán puestos a disposición del presidente Ricardo Blanco, quien a su vez los remitirá al fiscal judicial, quien deberá elaborar un informe. Una vez ese documento esté disponible, el Pleno del máximo tribunal deberá pronunciarse sobre el asunto.
