¿NO SABES QUÉ HACER EN IQUIQUE? LA LAGUNA ROJA ES UN DESTINO DESTACADO AL INTERIOR DEL NORTE CHILENO
Si estás planeando visitar la Laguna Roja desde la ciudad de Iquique en Chile, es esencial que tengas a mano un mapa que te permita llegar a este hermoso destino turístico. El lugar, es una de las atracciones más impresionantes de la zona y su visita es una experiencia que no te puedes perder.
La Laguna Roja es un cuerpo de agua salada ubicado a una altitud de más de 3.700 metros sobre el nivel del mar, en medio de un paisaje desértico y volcánico impresionante. Su color rojizo es el resultado de la alta concentración de minerales y microorganismos que habitan en ella, y es uno de los fenómenos naturales más sorprendentes que podrás ver en tu vida.
Para llegar a la Laguna Roja desde Iquique, es necesario tomar la Ruta 5 Norte y luego desviarse por la Ruta A-55, que te llevará hasta el poblado de Colchane, desde donde se inicia el ascenso hacia la laguna. El camino puede ser un poco complicado y requiere un vehículo adecuado para la ruta, por lo que es importante que planifiques bien tu viaje y lleves un mapa que te permita seguir la ruta adecuada.
Ubicada a más de 3.800 metros sobre el nivel del mar (M.S.N.M.) y en la comuna de Camarones, región de Arica y Parinacota la Laguna Roja es una fuente de agua natural en medio del altiplano chileno, distante a casi 7 horas de Iquique, unos 190 kilómetros, de los cuales los últimos 20 son intransitables para cualquier vehículo, y casi imposible llegar por territorio ariqueño hasta el lugar.
En la mística laguna roja se pierde la noción del tiempo, por la curiosa mezcla de colores que se dan en esta zona, que alguna vez tuvo una comunidad aymara que vivió en sus orillas, sin embargo, muchos se fueron debido a la leyenda que fueron contando las distintas generaciones de los ancestrales indígenas.
El color rojo de dicha laguna, según estudios científicos se debe a algunas algas microscópicas que habitan en su fondo, sin embargo, la zona también es fuente geotermal por naturaleza, lo que produce un burbujeo intermitente del agua, y cambios de temperatura que van de los 35 a los 50 grados.
La creencia de los lugareños dice que la Laguna Roja representa la fertilidad femenina y que debe ser tratada con mucho respeto por los visitantes. La leyenda dice que la laguna posee “poderes malditos”, en especial para “las almas maldadosas” que llegan al lugar con prepotencia, con energía negativa o con ganas de hacer daño. Los aymaras que sobreviven en las cercanías, en el poblado de Nama cuentan su historia, y comienzan a trabajar en un turismo rural, que no habían explotado, dado que la laguna se descubrió hace pocos años.
Nama está ubicada a 30 kilómetros de Camiña a 2.800 metros sobre el nivel del mar, y en el límite inter-regional de Tarapaca y Arica Parinacota. La comunidad está compuesta por 40 habitantes permanentes, quienes ofrecen a los turistas productos como: cordero asado, y frutos como membrillos, tunas y tumbos. A ellos se suma, el ajo que es muy requerido en el norte del país por su calidad y tamaño.
Nama tiene entre sus inmediaciones dos templos católicos, un museo, una escuela, el cementerio, una plaza de juegos y hospedajes pertenecientes a la comunidad.
Sin embargo, lo más importante son las antiguas construcciones de siglos de antigüedad que guardan el legado de la cultura aymara, como chulpas y pukarás. Solo hace 4 meses el pueblo cuenta con energía eléctrica, lo que ayudará para potenciar un turismo rural a baja escala.
