El 1 de enero de 2026 marcará un nuevo incremento en el sueldo mínimo en Chile, el cual alcanzará los $539.000 para trabajadores y trabajadoras entre 18 y 65 años, dando inicio al año con un alza relevante en los ingresos laborales. Hasta ahora, el monto vigente es de $529.000, cifra que rige desde mediados de 2025 tras la aprobación del respectivo proyecto de ley en el Congreso.
Este reajuste está contemplado en la Ley 21.751, iniciativa impulsada por el Ejecutivo y aprobada durante 2025, que estableció aumentos escalonados del ingreso mínimo. La normativa también fijó nuevos valores para otros grupos: las personas menores de 18 y mayores de 65 años pasarán a recibir un ingreso mínimo mensual de $402.082, mientras que el monto destinado a fines no remuneracionales subirá a $347.434.
El incremento que comenzará a regir en enero completa un proceso de alzas iniciado en 2022, cuando el sueldo mínimo se ubicaba en $350.000. Desde entonces, el ingreso base experimentó sucesivos reajustes que permitieron alcanzar los $500.000 antes de lo previsto y avanzar luego a los montos fijados para 2025 y 2026. Este camino fue desarrollado mediante acuerdos entre el Gobierno y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
De acuerdo con estimaciones oficiales, el aumento beneficiará directamente a cerca de 900 mil personas, contribuyendo a mejorar el poder adquisitivo y permitiendo que una familia promedio se ubique por sobre el umbral de la pobreza. Desde el Ministerio de Hacienda se ha destacado que estos avances se lograron en un contexto de desaceleración de la inflación, lo que favoreció un crecimiento real de los salarios.
Respecto a un posible nuevo reajuste durante el año, la ley establece que a más tardar en abril de 2026, el Presidente de la República deberá ingresar al Congreso un proyecto que proponga un nuevo aumento del sueldo mínimo, junto con eventuales ajustes a la asignación familiar, maternal y al subsidio familiar, con el objetivo de que entre en vigencia desde mayo de 2026.
Además, la normativa contempla mecanismos de apoyo para las micro, pequeñas y medianas empresas, los que se activarán si el incremento del salario mínimo supera la inflación efectiva registrada durante 2025, buscando resguardar el empleo y la sostenibilidad de las MiPymes.
