La división en el Congreso sobre la convocatoria al Consejo de Seguridad Nacional (Cosena) se profundiza. Por un lado, el presidente de la Cámara de Diputados, José Miguel Castro, exige activar al Cosena debido a la infiltración narco en el Estado y la liberación de un presunto sicario. «Valoramos que desde distintos sectores políticos se sumen a la solicitud de convocar al Cosena, dada la gravedad de los últimos acontecimientos conocidos», señaló Castro.
Castro argumenta que la ciudadanía espera respuestas claras y medidas concretas frente a una amenaza que ya no es solo delictual, sino también institucional. «La ciudadanía espera respuestas claras y medidas concretas frente a una amenaza que ya no es solo delictual, sino también institucional», enfatizó.
Por otro lado, el presidente del Senado, Manuel José Ossandón, se opone a convocar al Cosena, afirmando que primero se deben descubrir las herramientas para combatir la corrupción y aplicar cambios, incluso utilizando inteligencia artificial. «Una de las cosas que le falta a Chile, que nos falta como Estado, es la comunicación entre todos los ministerios», afirmó Ossandón.
Ossandón critica la liberación del sicario y enfatiza que se deben aclarar los casos y mostrarles a Chile por qué un delincuente de alta peligrosidad sale de la cárcel al otro día. «Yo creo que hoy día la urgencia está en aclarar los casos y mostrarles a Chile (…) por qué un delincuente de la más alta peligrosidad resulta que sale de la cárcel al otro día», reafirmó.
En un tono más polémico, Ossandón agregó que «me van a matar los diputados, pero se van a la chucha». La discusión se centra en si el Cosena es la solución para abordar la crisis de seguridad o si es ineficaz sin herramientas adecuadas para combatir la corrupción.
