La Unidad de Crimen Organizado y Drogas ha advertido sobre nuevas tendencias delictivas en Chile, señalando un incremento de delitos como robos de cajeros automáticos y vehículos, además de un alza en los llamados «delitos predatorios», como secuestros y extorsiones, que en su mayoría se atribuyen a extranjeros. La institución destaca que el crimen organizado ya tiene presencia en todo el país.
La senadora por Tarapacá, Luz Ebensperger, expresó su preocupación por la falta de control en las fronteras, que considera el punto crítico para frenar el avance de estas bandas. “El gobierno ha anunciado una inversión de 21.000 millones de pesos en tecnología, como drones y luces con visión nocturna. Bienvenido sea, pero ¿de qué sirve si no hay una capacidad de reacción eficiente?”, afirmó la legisladora.
Ebensperger apuntó al actual sistema migratorio como un incentivo para el ingreso clandestino. “Cuando los migrantes llegan y ponen un pie en Chile, ya no los puedes sacar. Se les recibe, se les da alojamiento y cuatro comidas diarias, incluso se les ayuda a buscar trabajo y a regularizar su situación. Esto es una invitación a que sigan llegando porque no hay consecuencias”, subrayó.
Finalmente, la senadora enfatizó la necesidad de reforzar la reacción inmediata en las fronteras y establecer sanciones más efectivas contra el ingreso ilegal. Según Ebensperger, “sin un marco legal claro y una capacidad operativa adecuada, la tecnología por sí sola no resolverá el problema”.
El informe de la Unidad de Crimen Organizado y las declaraciones de la senadora reflejan la urgencia de abordar este fenómeno de manera integral para contener su impacto en la seguridad nacional.
