
La polémica entre autoridades chilenas y el candidato presidencial boliviano Rodrigo Paz escaló tras las declaraciones del abanderado del Partido Demócrata Cristiano (PDC), quien sugirió que Carabineros de Chile podrían estar involucrados en robos de vehículos trasladados a Bolivia y planteó la posibilidad de legalizar autos robados o indocumentados, conocidos en Bolivia como autos chutos.
REACCIONES DE AUTORIDADES CHILENAS
El senador Manuel José Ossandón (RN) se mostró categórico ante los dichos de Paz:
“Que el candidato a la presidencia de Bolivia acuse a las policías chilenas de robar autos, es inaceptable. Los policías, los Carabineros, son gente honesta, que trabaja todos los días para defender nuestra patria”.
Ossandón además pidió al Gobierno de Chile enviar una nota diplomática a Bolivia exigiendo explicaciones:
“No se puede permitir que un candidato extranjero ensucie sin pruebas el nombre de nuestras instituciones policiales, sobre todo frente al crimen organizado”.
El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, también criticó la propuesta de legalización de autos robados:
“Establecer alguna forma de legalización de bienes obtenidos por un delito es un incentivo para que se sigan cometiendo ilícitos… en Chile, fuera de Chile, donde sea”.
“Debe existir colaboración entre gobiernos y Estados, pero bajo el principio de respeto al Estado de Derecho. No se puede plantear ningún incentivo para la comisión de ilícitos como, por ejemplo, el contrabando”, agregó el secretario de Estado.
DECLARACIONES DEL GOBERNADOR DE TARAPACÁ
El gobernador regional José Miguel Carvajal también se sumó a las críticas, señalando que la propuesta de Paz pone en riesgo la seguridad de las familias del norte chileno:
“Nuestra región no puede avalar este tipo de declaraciones. Legalizar vehículos robados significa normalizar la inseguridad que golpea a nuestras comunas”.
“Me parecen graves e irresponsables los dichos del candidato. Si estas son las ideas que promueve, el crimen organizado ha encontrado un aliado. Es inaceptable para quienes enfrentamos la actividad delictual en la frontera”, agregó Carvajal.
El gobernador enfatizó la importancia del rol estratégico de Tarapacá como puerta de entrada y salida de personas, bienes y servicios entre Chile y Bolivia:
“Tenemos lazos históricos con Bolivia y su comunidad, pero esta relación debe darse en base a las leyes de nuestro país, nunca a costa de avalar ilícitos”.
RESPUESTA DE RODRIGO PAZ
Frente a las críticas, Rodrigo Paz respondió invitando al presidente del Senado, Manuel José Ossandón, a visitar Bolivia y conocer de primera mano su propuesta:
“Le invito a que vea nuestra propuesta, que es contra la corrupción, contra aquellos que roban coches; más bien, para transparentar todos los coches que hay en Bolivia y cómo funcionan”.
“Le pido un favor: no caiga en la guerra sucia. Aquí en Bolivia hay una guerra sucia por el tema electoral, y no caiga usted en eso, sea parte de lo propositivo”.
El candidato incluso ofreció compartir un fricasé, plato típico boliviano, durante la visita para conversar sobre la iniciativa de legalización de autos chutos de manera abierta y transparente.
CONTEXTO ELECTORAL Y RELACIONES BINACIONALES
Rodrigo Paz obtuvo 32% de los votos en la primera vuelta presidencial de Bolivia, imponiéndose a Jorge “Tuto” Quiroga (26%) y enfrentará al expresidente en la segunda vuelta prevista para el 19 de octubre.
La polémica se da en un contexto de relaciones históricamente tensas entre Chile y Bolivia, marcadas por la pérdida del acceso soberano al océano Pacífico por parte de Bolivia y por la cooperación binacional en seguridad fronteriza. La legalización de vehículos robados, según autoridades chilenas, podría afectar la seguridad regional y el control del contrabando en la frontera.