La ministra de Defensa, Adriana Delpiano, se refirió al manejo de los medios de comunicación frente al polémico caso que involucra a cinco exfuncionarios de la Fuerza Aérea de Chile (Fach) por tráfico de Ketamina, señalando que hablar de narcoavionetas “no corresponde con la realidad”.
La titular de la cartera manifestó que, “yo más que narcoavioneta, que creo que es como un buen título periodístico pero no corresponde a la realidad, lo que hubo estrictamente fue el embarque de una maleta que traía droga hacia Santiago y que hasta el minuto la justicia ha determinado que hay cinco personas involucradas en ese avión completo y que han habido aparentemente vuelos anteriores en el mismo avión”.
A lo anterior, Delpiano agregó que se están tomando medidas para evitar casos como este o el ocurrido en el Ejército, indicando que, “nosotros estamos viendo de legislar, de poder aumentar las penas cuando se trate de uniformados que muevan droga o que participen de algún delito de esta naturaleza porque nos parece que esto es muy grave”.
“En eso está trabajando, hay un equipamiento especial. Tanto desde el Ministerio del Interior como desde el Ministerio de Defensa, para equipar no sólo a la policía, sino también a las propias Fuerzas Armadas, que acaban de comprar una cantidad importante de camionetas blindadas para poder circular en todo lo que es la zona fronteriza con mayores resguardos”, añadió.
En esta línea, la autoridad nacional informó que ya se tomó la decisión de ir cambiando las dotaciones para que no se produzca un habituamiento en que las personas estén tantos días en un mismo lugar y se establezcan vínculos, que, para ella, «son inevitables con las personas del lugar, etcétera, pero queremos mantener absolutamente al margen a nuestra Fuerza Armada de lo que puede ser el crimen organizado”, añadió.
Finalmente, concluyó que: “Sabemos que son muy graves y sabemos que, afortunadamente, hasta el momento, los dos casos se han detectado, han sido detectados por las propias instituciones, y eso no es un tema menor”, añadiendo que “mientras las personas están detenidas, están en la cárcel pública, y eso también es un elemento que esperamos sea muy disuasivo para cualquier otra persona que quisiera verse involucrada en un tema de esta naturaleza”.
