MILEI DENUNCIA AL SINDICATO AERONÁUTICO DE ARGENTINA POR «SECUESTRO» DE PASAJEROS
El sector aéreo mantiene desde agosto pasado un conflicto gremial con el Ejecutivo de Javier Milei debido a demandas salariales, que las autoridades han respondido con desregulaciones y con la intención de privatizar la empresa estatal Aerolíneas Argentinas.
Los aeropuertos de Buenos Aires vivieron una nueva jornada de caos en las últimas horas, ya que la huelga sorpresa convocada por la Asociación de Personal Aeronáutico (APA) causó demoras y cancelaciones en decenas de vuelos, sólo dos días después de otra medida de fuerza con consecuencias similares.
La situación se agravó, dado que según las denuncias, la empresa estatal que presta servicios de rampa, y el sindicato que los representa, habrían «secuestrado» a unos 2.000 pasajeros que quedaron retenidos en aviones durante horas, sin poder bajar.
El presidente Javier Milei respondió con una dura denuncia penal ante la Justicia: acusó “privación ilegítima de la libertad, extorsión y entorpecimiento del transporte aéreo” a la APA.
“El Gobierno va a ir a la Justicia por abandono y secuestro de personas, intimidación pública y bloqueo. El que las hace, las paga”, advirtió el portavoz presidencial, Manuel Adorni, en una comparecencia ante la prensa.
Por su parte, la APA argumentó que la medida de fuerza respondía a la decisión de la empresa Intercargo de “despedir arbitrariamente y sin causa a un trabajador de la base Aeroparque”. “Exigimos de forma urgente su legítima reincorporación. Advertimos que puede haber demoras por reuniones informativas. No vamos a permitir este tipo de provocaciones”, advirtió el sindicato que nuclea a los trabajadores de Intercargo en un comunicado. La empresa, en cambio, sostiene que despidió al trabajador por “abandono de su puesto de trabajo”.
Vale precisar que el conflicto se desató cuando, por una asamblea sorpresiva de trabajadores de Intercargo representados por la APA, la empresa interrumpió los servicios de rampas en el Aeroparque Jorge Newbery y en el de Ezeiza, quedando así los pasajeros varados dentro de los aviones.
Para el portavoz, los pasajeros fueron tomados como «rehenes», «con ataques de pánico y descompuestos» y hubo «familias que estuvieron encerradas durante horas por culpa del delirio terrorista sindical».
Ante esta situación, el ejecutivo ordenó la actuación de la Policía de Seguridad Aeroportuaria para «rescatar» a los pasajeros, con el apoyo de la Gendarmería y la Prefectura.
Edgardo Llano, líder de APA, respondió la acusación del Gobierno y negó que los pasajeros hayan sido rehenes.
“La gente estuvo esperando sus valijas, pero nunca estuvo encerrada. Algunos medios y el Gobierno desvirtuaron la situación, dijeron que la gente quedó arriba del avión, pero la realidad es que hasta que el micro no llega al pie del avión no pueden bajar los pasajeros y a los choferes de los micros los acompañó la policía aeroportuaria para llevar a los pasajeros a su destino que es la cinta de arribos de equipajes”, sostuvo.