Una grave denuncia realizó Macarena Undurraga, madre de un niño de 10 años con condición TEA, tras un incidente ocurrido el pasado 14 de octubre en la Escuela Cervantes Básica, dependiente de la Dirección de Educación Municipal (DEM) de Santiago. Según la apoderada, su hijo sufrió graves lesiones como resultado de bullying por parte de dos compañeros, quienes lo empujaron contra un fierro en el patio del establecimiento.
El menor presentó una herida recto-uretral compleja, según informes médicos, la cual requerirá cirugías reconstructivas en los próximos meses. Sin embargo, el colegio calificó el hecho como un “accidente escolar”, indicando en un comunicado que el niño fue empujado durante un juego de pelota y cayó sobre una estructura metálica. Ante esto, la madre insistió en que el episodio fue intencional, señalando que “lo molestaban por usar lentes y por su condición TEA; esto no fue un accidente”.
Desde la DEM de Santiago informaron que se abrió un sumario administrativo y se presentó una autodenuncia ante la Superintendencia de Educación para garantizar la transparencia en la investigación. Asimismo, afirmaron que ambos estudiantes involucrados fueron derivados a la Oficina de la Niñez para recibir acompañamiento especializado. Respecto a los antecedentes de bullying denunciados, aseguraron que estos fueron gestionados previamente por el equipo del Programa de Integración Escolar (PIE) y la jefatura de curso, y que no tendrían relación con el incidente.
El caso está siendo investigado por la Policía de Investigaciones (PDI) y la Fiscalía Metropolitana Centro Norte. Mientras tanto, la familia del menor sigue costeando terapias psicológicas por su cuenta. La DEM condenó las amenazas recibidas por el establecimiento y reiteró su compromiso con el esclarecimiento de los hechos y la protección de los derechos de los estudiantes.
