En una modesta vivienda de Alto Hospicio, donde las paredes parecían ser testigos mudos de un drama silenciado, seis niños crecían entre el abandono y la ausencia. Sus edades, tan distintas como sus miradas –desde apenas tres años hasta la adolescencia de 16–, narraban sin palabras la misma historia: la falta de cuidado, la desprotección y las huellas del maltrato.
El caso salió a la luz gracias a la valentía de un testigo, quien decidió romper el silencio y denunciar lo que ocurría tras esas puertas cerradas. La denuncia llegó a Carabineros del OS-9 de Tarapacá, una unidad acostumbrada a enfrentarse a crímenes invisibles, de esos que no suenan en las calles pero que marcan para siempre la vida de los más vulnerables.
Las diligencias, realizadas en coordinación con la Fiscalía Local de Alto Hospicio, no tardaron en revelar un cuadro desgarrador: los menores no solo estaban fuera del sistema escolar, sino que además presentaban lesiones atribuibles a maltratos. La investigación permitió acreditar el delito de abandono de menores, sumado a tratos crueles que ninguna infancia debería experimentar.
Con los antecedentes reunidos, el Tribunal de Garantía de Alto Hospicio autorizó la orden de detención contra la madre, una mujer boliviana de 30 años. El operativo fue rápido y preciso: durante la mañana de ayer, Carabineros concretó la aprehensión, poniendo fin –al menos de momento– a un ciclo de violencia y desprotección que había marcado la vida de los seis hermanos.
El caso, sin embargo, no cierra con la detención. Por instrucción del Tribunal de Familia, los niños fueron derivados a un hogar de cuidado temporal de la comuna, un espacio donde se espera que puedan comenzar a reconstruir su niñez, ahora resguardados por profesionales y alejados de los episodios de abandono que sufrieron en su propio hogar.
En medio de la dureza de los hechos, la historia abre una herida colectiva: la de una sociedad que muchas veces no alcanza a mirar dónde se esconde el dolor de los más pequeños. Carabineros y Fiscalía seguirán adelante con las investigaciones, mientras seis voces infantiles intentan recuperar, desde la fragilidad y la esperanza, la posibilidad de un futuro distinto.
