Con profunda esperanza y alegría cristiana, la Iglesia de San Marcos de Arica recibieron la ordenación de nuevo sacerdote para nuestra Iglesia.
La Diócesis de San Marcos de Arica inició el mes de María con el nacimiento de un nuevo sacerdote para nuestra Iglesia. De manos de Mons. Moisés Atisha Contreras, ordenó sacerdote este 08 de noviembre al P. Mauricio Valenzuela Carreño en una Iglesia Catedral acompañada de feligreses llenos de esperanzas en que Cristo nos sigue enviando pastores para el cuidado de su grey.
Distintas comunidades, desplegadas de toda la diócesis se hizo presente en la profunda alegría de recibir para toda la iglesia un nuevo sacerdote que bajo el lema sacerdotal “contigo y como tu señor” quiere trazar su ministerio en estas tierras del norte de nuestro país.
En la Homilía, el Obispo exhortó al Ordenando tener especial cuidado de hacer y conversar Diálogos que vaya llevando a profundidad la entrega. “Diálogo con Jesús, dador de sentido para tu vida, no dejes de rezar, poner la oración no como una carga sino como un verdadero servicio. El diálogo con los feligreses, no te están molestando, ellos son tu preocupación a la cual dedicas y ofreces el ministerio. Diálogo con el presbiterio, ellos son hermanos del que compartes la misión de apacentar al pueblo de Dios. Diálogo con tu Obispo, pastor de quien te da la misión asumir, es el signo de unidad con la Iglesia”.
Al ir finalizado las palabras, el prelado pidió al nuevo sacerdote que no deje de rezar por su iglesia, por sus hermanos presbíteros y por su obispo; además hizo pedido especial a los fieles tenerlo siempre presentes en las oraciones, tener siempre presente a todos sus sacerdotes y obispo en la súplica y plegarias.
Emotiva fue la ceremonia solemne de ordenación, de la cual toda la diócesis se hizo parte en la súplica de los Santos que pidió acompañar a este nuevo sacerdote para la iglesia. Emotivo fue además verlo revestido con los ornamentos del Sacerdote y confiándole el ministerio para el bien de todos la Iglesia. Verdadera alegría cristiana la celebración de la Santa Misa, puesto que después de cinco años no se tenía ordenación sacerdotal, una verdadera luz de esperanza en que Cristo no nos deja sin pastores.
En las palabras de agradecimiento, el P. Mauricio Valenzuela dio las gracias a Dios por este Don tan significativo que se derrama en su persona. “es un regalo del cual sólo digo que Sí, pongo mi confianza en ti, Señor, porque tu cariño es mi ser. Creo en una iglesia cada vez más sencilla, con mesa larga donde todos nos vemos como hermano”. Al final de la celebración, consagración al manto maternal de María Santísima al nuevo sacerdote, y con él a toda la Diócesis que se alegra por tener nuevo pastor para el cuidado de los fieles que caminan peregrinos al encuentro de Dios Padre.
Fuente: Departamento de Comunicaciones San Marcos de Arica