Con la soga al cuello y sin margen de error, La Roja enfrenta este martes un desafío que puede sellar su destino rumbo al Mundial de 2026. El rival será Bolivia, en los más de 3.600 metros de altitud de El Alto, en un partido donde a Chile solo le sirve ganar y mirar de reojo lo que ocurra con Venezuela.
En medio de un panorama crítico, Ricardo Gareca debió mover las piezas. Dos de sus nombres clave, Arturo Vidal y Guillermo Maripán, están fuera por sanción, obligando al técnico argentino a probar nuevas fórmulas en sus últimas sesiones de entrenamiento antes del viaje a tierras altiplánicas.
Así, todo indica que Benjamín Kuscevic entrará en defensa y que Felipe Loyola, quien venía cumpliendo funciones como lateral, subirá al mediocampo para cubrir la vacante del ‘Rey’. Además, Fabián Hormazábal será titular por la banda derecha, mientras que Marcelino Núñez asoma con fuerza gracias a su capacidad de remate a distancia.
El posible once que saltará a la cancha a las 16:00 horas incluirá a Brayan Cortés en el arco; Hormazábal, Kuscevic, Sierralta y Suazo en defensa; Loyola, Echeverría y Núñez en el medio; y en ofensiva, Lucas Cepeda, Alexis Sánchez y Darío Osorio. Un partido clave, que podría no solo definir el futuro de Chile en las clasificatorias, sino también marcar el fin del ciclo de Gareca al mando del equipo nacional.
