Las diligencias realizadas por el Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH) de la Fiscalía de Tarapacá y la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, permitieron identificar a quienes serían los autores del homicidio del ciudadano boliviano Fabián Gonzales Vaca, cuyo cuerpo fue encontrado con impactos de bala en el sector de la plaza de peaje Pampa Perdiz, comuna de Pozo Almonte, a fines de mayo de este año. Uno de los imputados fue detenido la semana pasada por la policía y otros dos se encontraban privados de libertad por otro delito.
LOS HECHOS
En la audiencia de formalización, la fiscal jefe Paola Apablaza explicó que el 28 de mayo pasado, los imputados Y.M.L. (chileno) y S.M.S. (peruano), habiéndose coordinado previamente para la compra de un kilo de clorhidrato de cocaína ofrecida por la víctima Fabián Gonzales, se dirigieron desde Pozo Almonte a Iquique en un vehículo marca Nissan, proporcionado por el imputado J.L.P. (venezolano), quien actuó como intermediario contactando al afectado. Como la idea era sustraer de manera violenta la droga que transarían con la víctima, Y.M.L. y S.M.S.portaban armas de fuego.
Es así como cerca de mediodía se produjo el encuentro entre la víctima y los imputados Y.M.L. y S.M.S., en la cercanía de la Plaza Condell, en Iquique, donde, tras un breve diálogo, Gonzales Vaca, quien no estaba armado, se subió al vehículo Nissan, convencido que le pagarían la suma de dinero, dirigiéndose todos hacia la comuna de Pozo Almonte.
Luego de conducir fuera de la ciudad de Iquique y durante el trayecto en la ruta A-16, el imputado S.M.S. le disparó a la víctima en al menos dos oportunidades, ocasionándole la muerte. Con la victima ya fallecida, los imputados se trasladaron hasta un sitio eriazo ubicado en un camino paralelo al sur de la ruta A-16, a la altura de la plaza de peaje Pampa Perdiz, lugar donde dejaron abandonado el cuerpo sin vida. Mientras todo esto ocurría, S.M.S. le enviaba constantes mensajes a J.L.P. narrándole lo sucedido.
ENCUBRIMIENTO
Posteriormente, los imputados le entregaron el vehículo a J.L.P., quien ante las evidentes manchas de sangre en los asientos traseros del móvil, los desmontó y ocultó, botando además dos vainillas que se encontraban al interior del móvil y que correspondían a las municiones percutadas en contra de la víctima, encubriendo así el delito.
Y.M.L. y S.M.S. fueron formalizados como autores del delito de homicidio calificado con alevosía y J.L.P. como encubridor del delito de homicidio.
La fiscal dio cuenta de las diligencias realizadas por la Policía de Investigaciones y el Equipo de Crimen Organizado y Homicidios que permitieron determinar cómo ocurrieron los hechos e identificar a los imputados.
Dada la gravedad de los hechos, el tribunal de Pozo Almonte acogió la solicitud de la Fiscalía y decretó la prisión preventiva de los imputados, fijando un plazo de investigación de 90 días.
Los imputados Y.M.L. y S.M.S. se encontraba en prisión preventiva tras ser detenidos un día después del homicidio en el operativo denominado “Caserío”, llevado adelante por la Unidad de Drogas de la Fiscalía de Alto Hospicio.
