COREA DEL SUR TIENE NUEVO PRESIDENTE: LEE JAE-MYUNG LOGRÓ EL 51.7% DE LOS VOTOS
Lee Jae-myung ha sido confirmado electo como el presidente electo de Corea del Sur, tras unos comicios anticipados marcados por la crisis institucional y la alta participación ciudadana.
El líder del Partido Democrático obtuvo el 51,7% de los votos, superando con holgura al conservador Kim Moon-soo (39,3%) y dejando muy atrás a otros rivales, según los sondeos a pie de urna realizados por las principales cadenas del país, que históricamente han mostrado alta fiabilidad.
La jornada electoral, celebrada este 3 de junio, registró una participación cercana al 80%, especialmente elevada en los bastiones progresistas del suroeste, reflejando el deseo de pasar página tras seis meses de inestabilidad política.
El contexto de estas votaciones fue excepcional, dado que, apenas medio año antes, el expresidente Yoon Suk-yeol intentó un autogolpe de Estado al declarar la ley marcial y suspender derechos fundamentales, lo que llevó a su destitución y a una profunda crisis de legitimidad institucional.
Lee Jae-myung, entonces líder opositor, fue una figura clave en la resistencia parlamentaria contra la medida de excepción, ganando notoriedad al protagonizar la defensa de la democracia en medio del asedio militar al Parlamento.
UN DEFENSOR DE LOS DERECHOS SOCIALES
Nacido en 1964 en una familia humilde, Lee Jae-myung es abogado de formación y ha construido su carrera política como defensor de los derechos sociales y la transparencia gubernamental.
Tras perder por escaso margen las presidenciales de 2022, enfrentó una intensa persecución judicial y un intento de asesinato durante la campaña de 2024, del que sobrevivió tras ser apuñalado en el cuello. Su trayectoria está marcada por la resiliencia y la capacidad de conectar con sectores populares, lo que le permitió capitalizar el descontento hacia el conservadurismo en crisis y prometer estabilidad económica, inversión tecnológica y reformas institucionales.
La victoria de Lee supone un cambio de rumbo para Corea del Sur y el regreso del bloque progresista al poder, en un momento en que la sociedad demanda cohesión nacional y respuestas a los desafíos económicos y democráticos.
