La tarde del domingo 8 de diciembre, en el Templo Catedral de Iquique, se celebró la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María.
La ceremonia marcó el cierre del mes consagrado a la madre de Cristo.
Cerca de las 17:00 horas fieles de los decanatos de Iquique Norte y Sur se reunieron en la Plaza Arturo Prat para, en procesión, dirigirse hacia la Catedral y participar en la eucaristía. Durante el recorrido, cada parroquia portaba una imagen de la Virgen y guiaba la oración correspondiente a su estación.
A las 18:00 horas, ya en el templo, la eucaristía fue presidida por el hermano Isauro Covili Linfati, obispo de la Diócesis de Iquique, y concelebrada por el padre Benito Tapia, vicario general, y el padre Javier Sáez, vicario pastoral, acompañados de otros sacerdotes y diáconos.
En su homilía el obispo invitó a los presentes a construir espacios llenos de belleza y pureza, inspirados en el ejemplo de María, quien dijo: “Soy la servidora del Señor, hágase en mí según tu palabra”. También exhortó a configurarnos con Jesús y a encarnar en nuestra vida la belleza de la palabra.
El obispo relacionó la celebración con el cántico del Magníficat, subrayando que celebrar esta solemnidad es apostar por un Dios de misericordia, que se manifiesta en favor de los pequeños, los pobres y los indefensos. Finalmente, instó a los fieles a renovar su vida de fe, asumir compromisos y corresponsabilidades, recorrer su propio camino de servicio siguiendo el ejemplo de María y anunciar la palabra del Señor a todos, fortaleciendo el camino sinodal.
La celebración transcurrió en un ambiente de alegría y participación. Antes de la bendición final, el obispo felicitó a ambos decanatos por la preparación de esta hermosa celebración.
Fuente: Iglesia de Iquique.
