Los cargadores de ZOFRI, representados por el dirigente y vocero Marco Torres, cumplen varios días de movilización en el recinto amurallado de Iquique. La paralización involucra a cerca de 500 trabajadores asociados y se debe al descontento con la administración por la falta de cumplimiento de acuerdos y la precariedad de sus condiciones de trabajo. El conflicto se centra en un petitorio de tres pilares, exigiendo dignidad laboral.
DEMANDA POR BONOS Y RETIRO DE TRABAJADORES MAYORES
La movilización inicial fue provocada por una cláusula especial para el pago del bono de diciembre de $300.000, el cual la administración estaba complicando. Los cargadores buscan que estos bonos «queden por siempre», considerándolos un derecho adquirido porque se han entregado por años en forma seguida, conforme a la Ley y la Dirección del Trabajo. Aunque el sindicato está recibiendo documentos para que los socios accedan al bono, aún esperan un documento de la administración que deje «zanjados los acuerdos» que causaron el conflicto.
Otro punto crucial es el incentivo al retiro para los trabajadores de mayor edad. El acuerdo original era la salida de 200 «viejitos», pero solo han concretado la salida de 100. Torres lamentó la situación de socios que están «muy enfermos» y cuya única esperanza es la concreción de este retiro. Señaló que hay gente de 80 años que trabaja con bastones.
El vocero exige que ZOFRI, «siendo una empresa seria, siendo una empresa estatal, se cumplan los acuerdos».
PRECARIEDAD LABORAL Y EXIGENCIA DE MECANIZACIÓN
La demanda más profunda es terminar con la precariedad laboral. Los cargadores piden tener imposiciones para acabar con la falta de seguros, derechos sociales, AFP y salud, situación que es compleja ante los accidentes y muertes dentro del recinto. Torres denuncia que realizan un trabajo manual y no mecanizado, cargando 100 o 120 kilos al hombro. Esto incumple la Ley del Saco (Ley N° 20.949), que establece un máximo de 25 kilos para hombres.
Por ello, exigen que se traiga maquinaria y que se mecanice el trabajo en las bodegas, tal como ocurre en el puerto. El dirigente concluyó que están trabajando «en la prehistoria«.
LLAMADO A LA AUTORIDAD Y ESFUERZOS DE DIÁLOGO
Torres indicó que la problemática ha sido llevada a la atención de diversas autoridades, incluyendo la Presidencia y ministerios. Mencionó que conversó con el presidente Gabriel Boric en Brasil sobre el tema del bioceánico, y que el presidente «accedió a buscar una solución a la problemática». Hizo un llamado a los parlamentarios de la región, como Danisa Astudillo y Renzo Trisotti, para que se unan en este «tema social» y contractual para terminar con la precariedad.
Cabe señalar que, hasta la publicación de esta nota, los dirigentes junto a los ejecutivos que están llevando esta negociación se han mantenido reunidos, pero aun no han llegado a un acuerdo total, por cuanto necesitan revisar un último punto, lo que eventualmente se podría zanjar durante la mañana de este miércoles.
