EE.UU. LANZA ATAQUE LETAL EN YEMEN CON 74 MUERTOS

Un bombardeo estadounidense sobre el puerto petrolero de Ras Issa, en la costa del mar Rojo, dejó al menos 74 muertos y 171 heridos, en lo que se considera el ataque más mortal desde que comenzaron las ofensivas de EE.UU. contra los hutíes en marzo pasado. La operación militar fue confirmada por el Comando Central de EE.UU. (Centcom), que señaló como objetivo la interrupción de ingresos ilícitos del grupo rebelde.
El puerto de Ras Issa, clave en la infraestructura de Yemen, ha sido señalado por Estados Unidos como un punto estratégico que los hutíes utilizan para financiarse mediante el contrabando de combustible. No obstante, según cifras de la ONU, esa instalación también representa una ruta esencial para la entrada de ayuda humanitaria, lo que ha encendido las alarmas por el impacto en la población civil.
El Centcom defendió el ataque, asegurando que se trató de una acción para cortar los fondos que alimentan las actividades terroristas de los hutíes en la región. Por su parte, los insurgentes calificaron el bombardeo como un «crimen de guerra» y una violación directa a la soberanía de Yemen, acusando a EE.UU. de atacar un sitio de uso civil vital para el país.
Desde Irán, estrecho aliado de los hutíes, también hubo una dura condena, calificando el ataque de “bárbaro” y contrario a los principios de la Carta de las Naciones Unidas. Mientras tanto, el gobierno yemení reconocido internacionalmente responsabilizó a los hutíes de haber transformado la terminal en una base para el tráfico ilegal de armas y combustible, intensificando aún más las tensiones en la región.