Un histórico fallo ha sido logrado por la Unidad de Análisis Criminal y Alta Complejidad (UNAAC) de la fiscalía de la Región del Maule, resultando en la condena de once integrantes de una peligrosa banda delictual que operaba en Curicó. Estos sujetos fueron condenados por delitos graves, incluyendo tráfico de drogas, asociación ilícita, lavado de activos y tenencia ilegal de armas de fuego, sumando un total de 201 años de cárcel. La condena representa un golpe significativo al crimen organizado en la zona.
La banda fue desarticulada en un megaoperativo realizado el 15 de diciembre de 2022 en la población Santa Lucía de Curicó, donde se incautaron drogas, joyas, autos de alta gama y más de 30 millones de pesos en efectivo. Este operativo fue el resultado de una extensa investigación liderada por el Ministerio Público, que se benefició del trabajo previo del OS 7 de Carabineros y de la Brigada Antinarcóticos (BRIANCO) de la PDI, quienes aportaron información clave para el éxito de la operación.
Rodrigo Pizarro, fiscal de la UNAAC a cargo de la investigación, destacó la importancia de la sentencia: «El tribunal oral dictó la sentencia definitiva condenatoria en contra de los integrantes de una asociación criminal que operó por bastantes años en la comuna de Curicó». Además, subrayó que «es un fallo que podríamos calificar de histórico, puesto que sería el primero en la región en un juicio oral en el cual se condena por asociación ilícita».
En base a los antecedentes presentados, el líder de la agrupación, Cristian Andrés Gutiérrez Rojas, fue condenado a 31 años de prisión. También fueron condenados su hermanastro Christofer Humberto Arteaga Rojas (21 años), Miguel Ángel Rojas Loaiza (21 años), y otros miembros de la banda con penas que varían entre 14 y 17 años. «Se condena a toda la asociación criminal que tanto daño causó en una población determinada en la comuna de Curicó», concluyó Pizarro, reafirmando el impacto positivo de esta resolución en la lucha contra el crimen organizado en la región.
