El también exsenador por el Maule se encontraba en delicado estado de salud desde 2011, cuando sufrió una hemorragia cerebral debido a una caída.
El excandidato presidencial venía de familia de políticos, ya que tanto su padre, Ladislao Errázuriz Pereira, como su abuelo, Ladislao Errázuriz Lazcano, fueron también senadores, tal como recuerda la Biblioteca del Congreso.
El padre de siete hijos, a diferencia de sus familiares, se presentó como candidato presidencial en 1989 del “centro-centro”, en donde adoptó su apelativo “Fra-Fra”, logrando el tercer lugar, detrás de Patricio Aylwin y Hernán Büchi, con un 15,43% de los votos.
Tras su fallida postulación a La Moneda, se postuló como candidato a senador por el Maule, siendo electo con la primera mayoría con el 37,85% de los sufragios. Sin embargo, también mantuvo una carrera en paralelo como empresario, en una trayectoria enfocada principalmente en los rubros retail, minero, automotriz y agrícola.
No obstante, su vida empresarial estuvo marcada por las polémicas, especialmente en 2011, cuando fue acusado de trata de personas, debido a la supuesta explotación de trabajadores paraguayos en sus fundos de la región de O’Higgins.
Pese a ello, el día de su formalización, el 24 de octubre de ese año, no se presentó, porque sufrió problemas cardíacos que obligaron su internación en la clínica de la Universidad Católica.
Una semana después, mientras se encontraba hospitalizado en este recinto, sufrió una caída que le produjo una hemorragia cerebral. Por lo anterior, Francisco Javier Errázuriz fue considerado enajenado mental y no fue juzgado por tráfico de personas.