
El IPSA registró un salto superior al 3% y alcanzó nuevos máximos históricos tras los resultados de las elecciones, que dejaron a José Antonio Kast y Jeannette Jara en segunda vuelta y redefinieron la composición del Congreso con una marcada ventaja para la derecha.
Apenas amanecía y la ciudad todavía bostezaba cuando, desde el corazón financiero de Santiago, un murmullo de euforia empezó a colarse entre torres de vidrio, pasillos alfombrados y pantallas que parpadeaban como si hubieran recibido un choque eléctrico. Algo había cambiado durante la noche. Algo se había desencadenado en las urnas, y el mercado, siempre impaciente, siempre nervioso, se levantó antes que todos para celebrarlo.
Eran las 9:00 cuando el IPSA, el termómetro más sensible de los grandes capitales del país, estalló hacia arriba con una fuerza que no mostraba desde hace siete meses. Como un resorte comprimido durante semanas, el índice salió disparado hasta rozar los 9.930 puntos, marcando un nuevo máximo histórico que sorprendió incluso a los operadores más veteranos, esos que ya creen haberlo visto todo.
Detrás del salto, la explicación era evidente: las elecciones del domingo habían reordenado el tablero político, y el mercado, tan rápido para castigar como para premiar, reaccionó sin titubeos.
Kast–Jara: la dupla que reescribió la mañana bursátil
La segunda vuelta quedó definida. Jeannette Jara y José Antonio Kast avanzaron tal como anticipaban las encuestas, pero el mundo financiero leyó otra frase entre líneas:
la derecha gana terreno, y Kast camina con viento a favor.
Con un Congreso inclinado hacia ese sector, la lectura fue inmediata: menos trabas, más certezas, y un menú legislativo más amable para el ciclo empresarial.
Y en la Bolsa, esas conclusiones se transformaron en números, y los números en euforia.
Un mercado desencadenado
Apenas sonó la campana, Latam (+3,6%), Banco de Chile (+3,2%) y SQM-B (+3,9%) se posicionaron en la cima de las acciones más codiciadas, marcando el pulso del arranque.
Pocos minutos después, las 29 acciones que componen el IPSA se encontraban en terreno positivo. Una marea verde que no se veía hace meses.
“Esto está explosivo”, se escuchó desde una mesa de dinero. Y no les faltaban motivos.
La sorpresa silenciosa: el Congreso se tiñe
La composición del Parlamento cayó como una ficha clave:
la oposición superó los 4/7 en la Cámara de Diputados, un umbral que al mercado le gusta, porque le recuerda estabilidad, orden y velocidad para tramitar leyes.
En el Senado, el escenario no fue tan rotundo, pero sí lo suficiente para instalar un concepto que los economistas repiten como mantra: un órgano más analítico que ideológico.
Tolosa: del optimismo desbordado al optimismo “con cinturón de seguridad”
Jorge Tolosa, operador de Vector Capital, advirtió que el repunte de la semana pasada —que dejó el viernes al IPSA en 9.600 puntos— ya era una señal de anticipación electoral.
Este lunes, dijo, el mercado pasó de la euforia sin filtros a una euforia más contenida:
“Los inversionistas ven despejado parcialmente el panorama. La suma de los tres candidatos de oposición supera el 50% y eso aumenta la probabilidad de que Kast llegue a la presidencia. Pero el 19% de Parisi reordenó todo”.
La frase dejó suspendida la idea de que las próximas semanas podrían traer sorpresas… y volatilidad.

El IPSA coquetea con los 10.000 puntos
Por momentos, el índice se encaramó sobre los 9.900 puntos, desafiando la barrera psicológica de los 10.000, un umbral que hasta hace poco parecía reservado para un futuro lejano.
Firmas como Credicorp Capital ya empiezan a proyectarlo:
si Kast gana, el IPSA podría escalar otro 10% y aterrizar en los 10.500 puntos.
Mientras tanto, el dólar cae como piedra en el agua
A diferencia del IPSA, el dólar decidió correr en sentido contrario: se desplomó más de $10, bajando hasta los $911 en su punto más bajo de la mañana.
La moneda estadounidense, usual refugio en momentos turbulentos, fue abandonada por los inversionistas como si hubiese perdido súbitamente su encanto.
Perspectivas globales: el mundo mira, pero no acompaña
Mientras Chile celebraba, los mercados internacionales seguían un guion menos luminoso:
- Euro Stoxx 50: –0,8%
- FTSE 100: –0,2%
- Hang Seng (Hong Kong): –0,7%
- Nikkei (Japón): –0,1%
Una fiesta local en medio de un vecindario global mediocre.
Corbo recuerda la tarea pendiente
El expresidente del Banco Central, Vittorio Corbo, lanzó una advertencia serena pero punzante:
“Chile ha crecido cerca de 2% en décadas. Si todo esto sirve para avanzar en permisos y disciplina fiscal, bien. Pero no olvidemos que el desafío sigue intacto”.
Aplausos en los pasillos financieros… y un silencio reflexivo detrás.
Una mañana histórica
Así terminó la primera mitad del lunes:
el mercado celebrando, los inversionistas corriendo de un lado a otro, el dólar cayendo, el IPSA rugiendo como si quisiera mordisquear los 10.000 puntos, y un país entero asimilando los resultados que reconfiguraron la política y encendieron motores económicos como hace tiempo no ocurría.
La historia recién comienza.
Y los mercados —como siempre— ya están escribiendo su nuevo capítulo.







