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SIMULACRO EN LOS VERDES MIDE LA CAPACIDAD DE REACCIÓN DE IQUIQUE ANTE EMERGENCIAS EN LA RUTA A-1

El estruendo de las sirenas y el movimiento de los equipos de emergencia sorprendieron a conductores y vecinos del sector Los Verdes, en Iquique. El simulacro organizado por Senapred Tarapacá puso a prueba la coordinación y la rapidez de respuesta ante un eventual desastre en la Ruta A-1.

La brisa marina no lograba disimular la tensión que se respiraba en Los Verdes. Entre conos naranjas, vehículos de emergencia y curiosos que frenaban su marcha para mirar, el sector se transformó por unas horas en el escenario de una emergencia que —por fortuna— era solo una simulación. Un bus y un vehículo menor habían “colisionado”, dando inicio a un operativo que puso a prueba la coordinación de todos los organismos de respuesta de la Región de Tarapacá.

El rugido de las sirenas se mezclaba con el sonido del mar. Bomberos, Carabineros, personal del SAMU, mutualidades y equipos de respuesta comunitaria formaban un solo cuerpo de acción bajo la supervisión de Senapred Tarapacá, liderado por su directora regional, Patricia Montenegro, quien observaba atentamente cada movimiento. “Estos ejercicios son fundamentales para medir la capacidad real de respuesta”, explicó en conversación con Vilas Radio.

“Octubre y noviembre son meses intensos en simulacros. Este en particular —organizado por la concesionaria de la ruta A-1 junto a Pullman San Luis— forma parte de nuestro calendario regional”, detalló Montenegro. Y agregó, con la serenidad de quien coordina en terreno, que lo esencial es “poner a prueba a los primeros respondedores y a la comunidad”.

Un llamado urgente a la prudencia

Mientras el operativo avanzaba sin sobresaltos, la escena captó la atención de los automovilistas. Algunos, incapaces de resistir la curiosidad, redujeron la velocidad para observar. “Un conductor casi provocó una colisión real”, advirtió Montenegro. “Por eso insistimos en el llamado a la prudencia. Todo está debidamente señalizado, pero necesitamos que la comunidad colabore, que comprenda que estos ejercicios son parte de nuestra preparación para enfrentar emergencias reales”.

No hubo cortes totales de tránsito, aunque una vía permaneció segregada a la altura de la pasarela de Los Verdes. Aun así, el despliegue fue visible y efectivo. Desde el aire, la escena habría parecido sacada de una película: luces intermitentes, camiones, rescatistas y un equipo comunitario —el CERT de Los Verdes— participando como “afectados” del supuesto accidente.

Simulacros que preparan y salvan

“Siempre buscamos que los ejercicios sean lo más cercanos a la realidad posible”, sostuvo la directora. Esa es la filosofía que guía el trabajo de Senapred: entrenar para que, cuando el desastre llegue —porque tarde o temprano llega—, la respuesta no dependa del azar.

Montenegro recordó otros ejercicios recientes: “Apoyamos simulacros en el Centro Penitenciario Femenino y en el de Alto Hospicio, en el Mall Plaza, y realizamos uno muy complejo en Pizagua, donde simulamos un corte de ruta por remoción en masa. Allí incluso se desplegó un rescate aeromédico con helicóptero, midiendo tiempos y capacidades reales”.

Y como si fuera poco, Tarapacá también fue escenario de un simulacro de terremoto e incendio en el Aeropuerto Diego Aracena, en conjunto con la Dirección General de Aeronáutica Civil. “Ha sido un periodo muy activo, pero necesario. Cada ejercicio nos deja lecciones y fortalece la coordinación entre instituciones”, recalcó.

Una red que se activa cuando todo tiembla

La directora explicó que el sistema de respuesta no se limita a bomberos, Carabineros y SAMU. “También participan municipios, empresas privadas, ONGs y la sociedad civil organizada. En emergencias como el incendio de Zofri, por ejemplo, coordinamos camiones aljibes del municipio de Iquique, Alto Hospicio, Aguas del Altiplano y la Armada. Todos forman parte de este engranaje que llamamos sistema regional de gestión del riesgo”.

Ese trabajo colaborativo —agregó— permite que la región no solo reaccione, sino que también mitigue y prevenga. “Cada institución tiene un rol que cumplir, desde el equipamiento hasta el apoyo psicológico. Lo importante es que todos sepan cómo actuar cuando el reloj corre en contra”.

Entre la simulación y la realidad

Al cierre del ejercicio, las sirenas comenzaron a apagarse y el tránsito volvió a fluir con normalidad. En el aire quedó ese silencio extraño que sigue a la adrenalina. La directora Montenegro volvió a insistir en el mensaje principal: “Queremos que la comunidad entienda que no se trata de alarmar, sino de preparar. Estos simulacros son una inversión en seguridad y vida”.

Mientras el sol descendía sobre Los Verdes, el operativo concluía con una sensación de calma y orgullo. Lo que para algunos fue un susto, para Senapred fue una victoria silenciosa: la confirmación de que Tarapacá sigue afinando su respuesta ante lo inevitable. Porque, en esta región sísmica y viva, prepararse no es una opción; es una necesidad.

Belén Pavez G., Periodista y Locutora. Licenciada en Comunicación Social. Productora general y Directora de prensa en Vilas Radio. Música y Cat lover.

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