La seguridad ciudadana volvió a tomar protagonismo en el norte del país con el segundo operativo nacional conjunto “Fortaleza”, ejecutado por Carabineros de Chile y la Policía de Investigaciones (PDI).
Entre la madrugada del martes 9 y la madrugada del miércoles 10 de septiembre, 6.733 efectivos policiales desplegaron un trabajo coordinado en las 16 regiones del país, con resultados que buscan impactar directamente en la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado.
Tarapacá bajo la lupa policial
En la región de Tarapacá, el operativo movilizó a 400 funcionarios entre Carabineros y PDI, quienes realizaron 3.331 controles preventivos de identidad y patrullaron zonas con alta incidencia delictual. La jornada dejó 135 detenciones, además del decomiso de 167 kilos de drogas, en una acción que combinó búsqueda de prófugos, controles migratorios y ejecución de focos investigativos.
La Seremi de Seguridad Pública, Ana María Peralta, destacó la relevancia del trabajo conjunto:
“Este operativo refleja el compromiso de nuestras policías y del Ministerio Público con la seguridad de la ciudadanía. La coordinación interinstitucional nos permite optimizar recursos, ampliar la cobertura territorial y entregar resultados concretos en la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado”.
Balance nacional: cifras que llaman la atención
A nivel país, el operativo Fortaleza dejó 3.348 detenidos, de los cuales 1.831 correspondieron a órdenes de aprehensión pendientes y 1.517 a detenciones en flagrancia. Entre los resultados también se destacan:
- 1.018 kilos de drogas decomisadas
- 147 armas de fuego incautadas
- 1.221 municiones confiscadas
El 77% de las detenciones se concentró en regiones fuera de Santiago, mientras que la Región Metropolitana registró el 23% restante.
Coordinación institucional como eje central
El ministro de Seguridad, Luis Cordero, resaltó la importancia de la integración entre Carabineros y la PDI:
“Esta operación denominada Fortaleza es la segunda a nivel nacional que se realiza entre ambas policías. El trabajo coordinado permite no solo integrar capacidades operativas, sino generar efectos concretos y notorios en la intervención oficial”.
El operativo se enmarca dentro de una estrategia de acciones focalizadas en áreas con mayor criminalidad, y busca consolidar un modelo de trabajo conjunto que combine prevención, investigación y control territorial, generando un impacto inmediato en la seguridad de los ciudadanos.
La mirada hacia el futuro
Con los resultados del segundo operativo Fortaleza, las autoridades regionales y nacionales esperan consolidar este tipo de acciones, ampliando su cobertura y eficacia, y reforzando la coordinación entre instituciones para continuar reduciendo la criminalidad y fortaleciendo la confianza de la ciudadanía en las policías.
