
Por primera vez, el sistema público de salud dispondrá de una inmunoterapia para enfrentar el cáncer de mama triple negativo, una de las variantes más agresivas y con menos alternativas de tratamiento. La decisión beneficiará a unas 650 mujeres cada año, marcando un antes y un después en la equidad de acceso a terapias de última generación.
La noticia fue entregada con emoción contenida por la ministra de Salud, Ximena Aguilera. No se trataba de un anuncio más en la agenda sanitaria, sino de un paso histórico en la lucha contra uno de los cánceres más temidos: el de mama triple negativo.
Tras meses de negociaciones, el Ministerio de Salud selló un acuerdo con el laboratorio MSD que permitirá incorporar el fármaco Pembrolizumab (Keytruda®) al Programa de Drogas de Alto Costo (DAC). Con ello, el Estado garantizará que mujeres que hasta ahora tenían como únicas opciones la quimioterapia, la cirugía o la radioterapia, accedan a un tratamiento de última generación que mejora sustancialmente las posibilidades de sobrevida.
“Sabemos que este cáncer afecta principalmente a mujeres jóvenes y que su agresividad cambia radicalmente sus proyectos de vida. Por eso, esta incorporación no solo es un avance clínico, sino también un acto de equidad: el medicamento ya estaba disponible en el sector privado, y ahora estará al alcance de las pacientes del sistema público, con copago cero”, afirmó Aguilera.
Un cambio en la historia del tratamiento
El cáncer de mama triple negativo (CMTN) representa entre el 10 y el 15% de los diagnósticos de cáncer de mama en Chile. A diferencia de otros subtipos, no responde a terapias hormonales ni a tratamientos dirigidos contra HER2, lo que lo hace especialmente complejo.
En este contexto, la llegada de Pembrolizumab abre un horizonte distinto. Esta inmunoterapia activa el propio sistema inmune para que reconozca y ataque las células tumorales, lo que ha demostrado mejorar los resultados clínicos y aumentar las tasas de supervivencia.
El Minsal estima que unas 650 mujeres al año podrán beneficiarse directamente con esta incorporación. “Con esto reducimos la brecha que históricamente ha separado al sistema público del privado en acceso a medicamentos innovadores”, subrayó la ministra.
Una alianza política y social
El anuncio se hizo en el marco de una reunión con la llamada “Bancada Rosa”, un grupo transversal de diputadas lideradas por Carla Morales, que junto al Observatorio del Cáncer han empujado la agenda de acceso equitativo a tratamientos.
“Cuando nos comprometimos durante la discusión presupuestaria del año pasado a incluir este medicamento, sabíamos que la presión de las organizaciones de pacientes y del Congreso era fundamental. Hoy podemos cumplir con esa palabra y dar tranquilidad a cientos de familias”, sostuvo Aguilera.
La ministra adelantó que el tratamiento tendrá cobertura plena a partir de 2026, aunque desde ahora y durante 2025 también estará disponible bajo la modalidad de riesgo compartido, lo que acelera su acceso mientras se completan los trámites administrativos.
Impacto en la vida de las pacientes
Para quienes enfrentan un diagnóstico de cáncer de mama triple negativo, cada mes puede significar la diferencia entre la esperanza y la desesperanza. La incorporación de Pembrolizumab no solo mejora la expectativa de vida, sino que abre la posibilidad de tratamientos menos invasivos y con mayor calidad de vida.
“Con este medicamento cambia totalmente la posibilidad de sobrevida de las mujeres afectadas”, remarcó la ministra, quien insistió en que la medida es parte de un esfuerzo mayor por acercar la innovación al sistema público.
Un hito en equidad sanitaria
La incorporación de esta inmunoterapia marca un punto de inflexión en la política pública de salud en Chile. No solo por la relevancia médica del fármaco, sino porque materializa un principio que durante años ha sido reclamado por pacientes y especialistas: que la calidad del tratamiento no dependa de la capacidad de pago, sino del derecho universal a la salud.