
En una verdadera fiesta cultural se transformó el Complejo Penitenciario de Arica con la celebración del Machaq Mara, el año nuevo andino, que conmemora el inicio del ciclo agrícola y espiritual en los pueblos originarios.
La actividad, que marcó el recibimiento del año 5.533, estuvo llena de color y tradición gracias a la participación de comparsas afrodescendientes, tarqueadas y agrupaciones de pueblos andinos que dieron vida al evento dentro del recinto penitenciario.
El alcalde de Arica Orlando Vargas Pizarro, destacó la importancia de este tipo de instancias, señalando que acercar la cultura a los internos no solo les brinda un momento de alegría y reflexión, sino que también contribuye a mejorar su bienestar emocional durante su estadía en el centro. Actividades como el Machaq Mara permiten tender puentes entre la cultura, la educación y la reinserción, abriendo nuevas oportunidades para quienes buscan un nuevo comienzo.
“Hemos venido a apoyar, porque la autoridad debe estar aquí, donde la gente nos pide, y hoy hemos visto como los internos son músicos, bailarines, y eso es muy lindo, porque cuando salgan de acá lo hagan rehabilitados”, expresó Vargas.
Cabe señalar que la iniciativa fue organizada por la Escuela Básica Pedro Gutiérrez Torres, que funciona al interior del penal, junto a Gendarmería de Chile, y contó con el apoyo de la Municipalidad de Arica. Actualmente, esta escuela atiende a más de 500 internos, quienes se capacitan en diversos oficios como vestuario, mueblería, serigrafía y electricidad, como parte de un programa de reinserción social.
“Entregarle herramientas a los usuarios para que ellos puedan en un futuro reinsertarse a la sociedad de buena manera”, Comandante Víctor Briceño, jefe (s) Complejo Penitenciario Arica.
El objetivo principal de la actividad fue promover el conocimiento y la valoración de las tradiciones culturales de la región entre la población penal. Dado el carácter multicultural del territorio de Arica y Parinacota, se busca que los internos se empapen de estas raíces ancestrales y puedan desarrollar un sentido de identidad y pertenencia que favorezca su proceso de reintegración a la sociedad.