El Estado entregó a Carabineros un terreno fiscal de casi 14 hectáreas en Villa Frontera para la construcción de la nueva Escuela de Formación de Arica, un proyecto clave para reforzar la seguridad en una región fronteriza y estratégica.
El viento del desierto corría suave en Villa Frontera, al norte de Arica, cuando el Estado dio un paso que no se mide en metros cuadrados, sino en proyección institucional. Allí, en un amplio terreno fiscal que por años permaneció en silencio, comenzó a escribirse una nueva página para la seguridad pública de la región.
En una ceremonia cargada de simbolismo, el Ministerio de Bienes Nacionales entregó a Carabineros de Chile un inmueble de 13,9 hectáreas, espacio donde se levantará la nueva Escuela de Formación de Carabineros, Grupo Arica, un proyecto largamente esperado por la institución y por una región marcada por su condición fronteriza y estratégica.
El acto fue encabezado por el general director de Carabineros, Marcelo Araya Zapata, junto al ministro de Seguridad Pública (s), Rafael Collado González, además de autoridades regionales y representantes de los servicios públicos, quienes coincidieron en un mensaje central: invertir en formación policial es invertir en seguridad de largo plazo.
UNA ESCUELA PARA LOS DESAFÍOS DEL NORTE
No se trata solo de cambiar de dirección. La actual Escuela de Formación de Carabineros en Arica funciona frente a Playa Las Machas, en un terreno privado concesionado y ubicado en una zona de riesgo ante un eventual tsunami. La nueva ubicación en Villa Frontera no solo supera esas vulnerabilidades, sino que ofrece mejor conectividad, mayor superficie y condiciones óptimas para el entrenamiento moderno.
El nuevo recinto permitirá proyectar una infraestructura acorde a los desafíos actuales: formación integral, preparación operativa, disciplina institucional y arraigo territorial para quienes serán los futuros carabineros que custodiarán el extremo norte del país.
“ESTE PROYECTO DEJA HUELLA EN LA COMUNIDAD”
Al recibir oficialmente el inmueble fiscal, el general director Marcelo Araya destacó el alcance del proyecto más allá de los muros que se construirán.
“Este proyecto generará un impacto real en la comunidad y fortalecerá la seguridad pública en la región. Como institución, sentimos una profunda gratitud por la voluntad del Estado de concretar este anhelo, que refuerza nuestra misión en Arica y en todo el país”, señaló.
El alto mando policial subrayó que esta iniciativa se suma a una serie de inversiones recientes: nuevos vehículos, tecnología operativa y la próxima incorporación de la aeronave más moderna que tendrá Carabineros en la región, un helicóptero que reforzará la capacidad de respuesta en un territorio extenso y complejo.
SEGURIDAD QUE PERMANECE
Desde el Gobierno, el mensaje fue claro. El ministro (s) Rafael Collado González enfatizó que la entrega del terreno responde a una política estructural, no coyuntural.
“Este hito refleja una estrategia clara del Estado: invertir en infraestructura que queda y en instituciones que se sostienen en el tiempo. La futura escuela responde a las particularidades de una región fronteriza y estratégica, fortaleciendo la presencia del Estado y la formación de carabineros preparados para los desafíos actuales y futuros”, afirmó.
Collado destacó además el trabajo coordinado entre el Gobierno Regional, Bienes Nacionales y Carabineros, subrayando que la seguridad se construye con colaboración interinstitucional.
VILLA FRONTERA, UN POLO DE SERVICIOS PÚBLICOS
El seremi de Bienes Nacionales, Rodrigo Díaz, puso énfasis en el valor territorial de la decisión. Explicó que el terreno entregado fue recuperado gracias a la coordinación con el Ejército y que forma parte de una planificación mayor para Villa Frontera.
“Hemos entregado inmuebles a Bomberos, Salud, juntas de vecinos y hoy a Carabineros. Este sector es clave para el desarrollo urbano y social de Arica. Cumplimos la palabra empeñada como Gobierno de potenciar la seguridad en la región”, señaló.
UNA REGIÓN QUE CRECE, UNA PRESENCIA QUE SE FORTALECE
La entrega de este terreno marca un precedente: es la primera destinación fiscal a Carabineros concretada en la región durante el actual gobierno. A ello se suma otro proyecto en curso: la asignación de 0,5 hectáreas para la construcción de la Sexta Comisaría de Arica, destinada a cubrir el sector norte de la ciudad, una zona que ha experimentado un crecimiento acelerado.
Así, mientras el terreno en Villa Frontera comienza a proyectarse como una escuela, el mensaje es más amplio: el Estado refuerza su presencia donde más se necesita, formando a quienes deberán enfrentar el delito, resguardar la frontera y garantizar seguridad en una de las zonas más estratégicas del país.
En medio del desierto, el futuro de Carabineros en Arica ya tiene suelo firme.
