El nuevo balance del Centro de Estudios y Análisis del Delito dejó una noticia particularmente positiva para el norte grande: Tarapacá encabeza la reducción de robos violentos en el país, con una caída de 29,1% entre enero y septiembre de 2025. La cifra la sitúa como la región con el avance más contundente en este tipo de ilícitos, considerados entre los que más afectan la sensación de seguridad de la población.
UNA TENDENCIA QUE SE EXTIENDE A TODO EL PAÍS
Aunque Tarapacá lidera con holgura, el fenómeno no es aislado. El informe muestra que, a nivel nacional, los robos violentos bajaron un 8%, pasando de 88.423 a 81.813 casos en un año. Se trata de la disminución interanual más significativa del periodo, y que apunta a una estabilización progresiva de los indicadores delictuales tras la pandemia.
Entre los delitos que impulsan esta baja destacan el robo violento de vehículo, con una reducción de 19,6%, y los robos con violencia o intimidación, que retrocedieron 11,3% respecto al mismo tramo del año anterior.
ARICA Y PARINACOTA Y BIOBÍO TAMBIÉN MARCAN FUERTES DESCENSOS
El estudio confirma que 15 de las 16 regiones del país lograron disminuir sus tasas de robos violentos. Tras Tarapacá, los retrocesos más marcados corresponden a Arica y Parinacota (-26,7%) y Biobío (-20,6%), consolidando un cuadro general de mejoras que se extiende de norte a sur.
OTROS DELITOS DE ALTO IMPACTO TAMBIÉN CAEN
La baja no se limita a los robos. Los delitos que afectan de forma directa la vida cotidiana también muestran retrocesos. La violencia intrafamiliar disminuyó 3,2%, mientras que los abusos sexuales registraron una baja de 5,2% en comparación con 2024.
Ambos indicadores refuerzan la tendencia a la baja en delitos de mayor connotación social, aunque las autoridades advierten que aún persisten brechas importantes en la denuncia y prevención.
