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SILENCIO EN EL ALTIPLANO: APARECEN MUERTAS SEIS AVES EN EL LAGO CHUNGARÁ TRAS DERRAME DE ACEITE QUE SACUDE AL PARQUE LAUCA

La tragedia ecológica ya deja víctimas visibles: seis aves han muerto y decenas siguen en riesgo, mientras brigadas, científicos y empresas especializadas intentan contener el avance de miles de litros de aceite en uno de los ecosistemas más frágiles del norte de Chile.

El amanecer altiplánico, ese que suele despertar entre nevados eternos y bandadas que levantan vuelo como pinceladas vivas, hoy luce distinto. En la orilla del Lago Chungará, a más de 4.500 metros de altura, el viento arrastra un silencio incómodo. Un silencio que pesa. Un silencio que cuenta muertos.

Porque seis aves —dos taguas, tres patos jergón chico y un pato puna— ya no surcan las aguas. Flotan, inmóviles, víctimas del derrame de 22 mil litros de aceite de soya que, desde la semana pasada, se expande como una sombra aceitosa sobre uno de los lagos más emblemáticos del Parque Nacional Lauca.

La escena es brutal. Y es apenas el inicio.

Una emergencia que crece mientras el aceite se esconde entre juncos y pajonales

La tragedia comenzó el 19 de noviembre, cuando un camión boliviano volcó en plena Ruta Internacional 11-CH. Lo que pareció un accidente aislado se convirtió rápidamente en una emergencia ambiental de gran escala: el aceite descendió hacia el bofedal y terminó infiltrándose en las aguas del Chungará, una joya altiplánica donde viven especies consideradas vulnerables.

Desde entonces, funcionarios de Conaf, voluntarios y expertos trabajan a contrarreloj. A mano, con baldes, paños absorbentes, contenedores gigantes y dos embarcaciones que recorren la orilla a un metro de profundidad, donde se concentra la mayor parte del material contaminante.

En tres días de labores intensivas —jueves, viernes y sábado— lograron retirar 2.900 litros de aceite. Un avance importante, sí, pero mínimo frente a la magnitud de la emergencia.

80 aves potencialmente afectadas: rescates, agonías y carreras contra el tiempo

Los equipos de fauna contabilizan alrededor de 80 aves en riesgo. Diecisiete de ellas fueron capturadas en las primeras horas:
11 sobrevivieron y fueron derivadas al SAG, entre ellos ocho patos puna, dos taguas gigantes y un cormorán.
Seis murieron, pese a los esfuerzos.

“Por ahora no se han concretado nuevos rescates”, reconoció el jefe del Departamento de Áreas Silvestres Protegidas, Sandro Maldonado, quien admite que los próximos días serán decisivos para determinar cuántas más aparecen afectadas.

Mientras, los especialistas siguen evaluando la flora. Pajonales, tolas, suputulas e incluso las yaretas —catalogadas como vulnerables— presentan trazos de aceite. El daño, por ahora, no avanza… pero tampoco retrocede.

Spill Tech entra en escena: operación quirúrgica para salvar el lago

El lunes, tras la Alerta Amarilla de Senapred, arribaron al sector los especialistas de Spill Tech, una empresa dedicada a desastres de contaminación. Su misión: diseñar un plan técnico para extraer el aceite de manera segura y acelerar el rescate de fauna.

“La prioridad es evaluar la propuesta de trabajo para retomar cuanto antes las labores de rescate”, enfatizó Maldonado.

El director regional de Conaf, Lino Antezana, detalló que la empresa entregará un plan formal para coordinar a casi una decena de instituciones públicas, privadas y voluntarios que se han sumado: Norte Outdoor, Bitumix, ENGIE, ONG Aka Pacha, ONG Matter of Trust, operadores turísticos, la Armada, Vialidad del MOP y el Municipio de Putre.

Una red humana tratando de revertir el daño que dejó un solo camión volcado.

La lucha desde el agua: embarcaciones rodeando un gigante herido

El plan actual se basa en un trabajo minucioso: las embarcaciones bordean la orilla del lago, donde el aceite se acumula como una capa viscosa difícil de atrapar. No es petróleo, pero su comportamiento en agua fría y a gran altitud es igual de traicionero.

Cada litro recuperado es un pequeño triunfo. Cada ave rescatada, una victoria emocional.
Cada ave muerta, un recordatorio de que el reloj corre.

Un lago emblemático en jaque

El Chungará no es cualquier lago. Es un símbolo. Uno de los más altos del mundo, refugio de especies, espejo de volcanes, joya turística y pulmón ecológico del altiplano.

Hoy está herido.
Y su recuperación dependerá de la capacidad del sistema público, la ciencia y la comunidad de actuar antes de que el daño se vuelva irreversible.

Mientras tanto, en la orilla, flotan aún los cuerpos de las primeras víctimas.
Y el silencio, más denso que el aceite, sigue suspendido sobre el agua.

Belén Pavez G., Periodista y Locutora. Licenciada en Comunicación Social. Productora general y Directora de prensa en Vilas Radio. Música y Cat lover.

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