Un balde de agua fría recibió esta mañana la selección Argentina en este mundial 2022 liderada por su capitán Lionel Messi, el cual fue sorprendida por la selección de Arabia Saudita quien tras ganar el encuentro 2 a 1 complicó el panorama mundialista soñado por la hinchada y su técnico Lionel Scaloni.
El recorrido en la última oportunidad de Leo Messi por salir con el trofeo mundialista bajo el brazo comenzó a ser cuestionado muchos medios, donde catalogan como una “pesadilla” el encuentro vivido ante los asiáticos quienes en cinco minutos lograron remontar el partido en Doha.
Si bien, el encuentro no sepulta las aspiraciones completas de Argentina, si reduce notablemente el margen de error del campeón del mundo en 1978 y 1986, quien no puede fallar ni contra México ni frente a Polonia (rivales de grupo) para hacerse un espacio en los octavos de final.
La mayoría de los amantes del fútbol no esperaban de esta manera el final de rachas consecutivas por parte de Lionel Scaloni el cual cosechó treinta y seis partidos sin perder, al borde del récord de Italia, sin embargo, Arabia obtuvo un triunfo histórico y provocó una convulsión en Messi y compañía.
EL PARTIDO
Previo al partido Scaloni apostó finalmente por Alejandro “Papu” Gómez en vez de Alexis Mac Allister el mediocampo en la vacante que dejó Giovani Lo Celso (lesionado). También fue algo inesperada la inclusión en el lateral izquierdo de Nicolás Tagliafico. Daba la sensación de que el lugar era para Marcos Acuña.
Comenzado el encuentro, Argentina intimidó a Arabia Saudita resignado al principio ante la ofensiva trasandina, donde incluso, a los 2 minutos, Messi tuvo el primer remate al arco tapado por el meta Mohammed Khali Al-Owais. Sin embargo, la recompensa vendría a los 10’ (gol cobrado por “La Pulga”), después que “Albiceleste” lograra abrir el marcador por un penalti insospechado que detectó el VAR. Un agarrón de Saud Abdulhamid sobre Leandro Paredes que había pasado desapercibido.
Posterior a ello y en ocho minutos, los argentinos convirtieron tres goles, uno de Messi y dos de Lautaro Martínez, sin embargo, todos fueron considerados inválidos tras ser detectados por el VAR como fuera de línea.
Iniciado el segundo tiempo, los arábicos se encontraron con la gran proeza, en el cual sorprendieron y enmudecieron a todo estadio repleto de hinchas argentinos. El primero llegó tras un buen centro de Firas Al Buraikan sobre Saleh Al Shehri que superó a Romero y cruzó la pelota lejos de Emiliano Martínez. Seis minutos después, en un golazo de Salem Al Dawsrai, que en el vértice del área dejó en evidencia a cuatro defensas y se inventó un tiro a la escuadra que alcanzó la red.
Tras este inesperado resultado, los asiáticos se convirtieron en un verdadero muro, siendo la máxima figura el portero árabe que desbarató cualquier intento de Argentina que buscó con insistencia el arco rival.
Los argentinos se quedan sin margen de error para lo que queda mundial, donde este sábado tendrán que medirse ante México y posterior a ello ante Polonia el miércoles 30 de noviembre.
