- La medida establece una cotización progresiva de exclusiva responsabilidad del empleador, que se sumará al ahorro individual y a un fondo solidario para mejorar las jubilaciones futuras.
Este nuevo porcentaje será de cargo exclusivo del empleador, es decir, no implicará descuentos adicionales para los trabajadores. La medida está contemplada en la Ley 21.735, publicada el 26 de marzo de 2025, y busca fortalecer el sistema previsional a través de un enfoque mixto, que complemente la capitalización individual con un componente solidario y colectivo.
¿CÓMO SE DISTRIBUIRÁ EL NUEVO APORTE?
Según lo establecido en la ley, este nuevo porcentaje se dividirá en dos fondos distintos:
- Un 6,0% se destinará a la cuenta individual de ahorro previsional del trabajador.
- El 2,5% restante irá al Fondo Autónomo de Protección Previsional (FAPP), el cual financiará beneficios como el Seguro de Invalidez y Sobrevivencia (SIS), compensaciones por años cotizados y apoyos dirigidos especialmente a mujeres.
¿QUÉ DEBEN HACER LAS EMPRESAS?
Dado que se trata de un cambio estructural, se recomienda que las organizaciones comiencen desde ya a preparar su implementación. Así lo señala el especialista en relaciones laborales y director de EDIG, José Miguel Martínez, quien advierte que es necesario adaptar tanto los sistemas internos como las políticas laborales:
“Es fundamental que las empresas revisen sus sistemas de remuneraciones, actualicen sus plataformas de pago previsional y busquen asesoría técnica o legal para garantizar el cumplimiento oportuno de esta nueva obligación. Aunque la implementación es gradual, no hay que esperar hasta el último momento: el cambio debe incorporarse en la planificación financiera y laboral de este año”.
ACCIONES RECOMENDADAS:
- Capacitar al equipo de Recursos Humanos en relación con la nueva normativa.
- Revisar contratos y reglamentos internos para asegurar que estén alineados con los cambios legales.
- Incluir el impacto financiero de la medida en los presupuestos 2025-2026.
- Informar a los trabajadores que este nuevo aporte no implicará una reducción en sus ingresos mensuales.
OTRAS MEDIDAS
Además del nuevo esquema de cotizaciones, la reforma incorpora otros beneficios que comenzarán a regir en los próximos meses. Entre ellos se encuentra el aumento de la Pensión Garantizada Universal (PGU), que subirá a $250.000 mensuales a partir de septiembre de 2025. Esta mejora beneficiará, en una primera etapa, a personas de 82 años o más y a quienes sean parte de leyes reparatorias.
Junto con ello, se establecerá un nuevo beneficio por años cotizados, que contempla el pago de 0,1 UF por cada año de contribución al sistema, con un tope de 25 años, como reconocimiento al esfuerzo previsional sostenido.
Para más información sobre la Reforma de Pensiones y sus implicancias para trabajadores y empleadores, se puede consultar el sitio web oficial de la Subsecretaría de Previsión Social.
