NICOLÁS MADURO ES RATIFICADO COMO PRESIDENTE DE VENEZUELA POR EL TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, controlado por magistrados oficialistas, ratificó a Nicolás Maduro como presidente del país, validando su triunfo en los comicios del 28 de julio, lo que le permitirá continuar en el cargo hasta 2031. La Sala Electoral del TSJ certificó “de forma inobjetable” los resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE), desestimando las acusaciones de fraude que surgieron desde la oposición y el extranjero.
El candidato opositor Edmundo González Urrutia, quien había denunciado irregularidades en el proceso, criticó duramente la decisión del tribunal, afirmando en sus redes sociales que «ninguna sentencia sustituirá la soberanía popular». González Urrutia acusó al TSJ de actuar con parcialidad, lo que, según él, «solo agravará la crisis» en Venezuela. Por su parte, el TSJ defendió su veredicto basándose en un informe elaborado por expertos nacionales e internacionales, cuya identidad y detalles del proceso no fueron divulgados.
Esta decisión judicial se produce en medio de crecientes críticas internacionales. El Consejo de Derechos Humanos de la ONU alertó sobre la “falta de imparcialidad e independencia” tanto del TSJ como del CNE, apuntando al control que ejerce el régimen chavista sobre estas instituciones. La Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos sobre Venezuela subrayó que este control pone en duda la capacidad del sistema judicial para resolver el conflicto político en el país.
