Después de conocer la rotura de una tubería alimentadora de agua potable en la calle Proyectada del sector sur que provocó grandes daños a casas y la calzada el pasado 30 de mayo, nuevamente este lunes volvió a colapsar en el mismo sector.
En ese sentido, Joao Ávalos Parra, ingeniero constructor y docente de Inacap Iquique, en conversación con Vilas Radio, comentó que lo sucedido en dicho lugar, fue un hecho lamentable que “desde el punto vista técnico era algo que no se podría prever según la experiencia que tengo”.
Según el ingeniero, lo que falló fue la alimentadora de 600 milímetros, que es una tubería de gran envergadura para los temas hidráulicos, “que lleva una presión nominal del agua muy alta, son presiones que podrían hacer mucho daño. Bueno el daño ya lo hicieron, que no causó daño a ninguna persona”.
El profesional señaló que la materialidad de esa tubería es la que se utiliza y que está normada, “a modo personal creo que pudo haber fallado la materialidad, porque las tuberías de HDPE (nombre del material) tienen una vida útil de 50 años, por lo bajo y que para comprobar eso, la sanitaria debería hacer un estudio, que ya tienen que haberlo indicado, o la otra opción es que se haya instalado mal”, explicó.
En cuanto a la segunda opción, Ávalos detalla que ese tipo de tuberías tienen una forma de instalación bastante detallado y normado, “pues se debe hacer la zanja se pone una capa de arena, la cañería y encima de ella nuevamente se tapa con arena y luego estabilizado, a una profundidad de 1,10 centímetros”, expresó.
EL IMPACTO DEL SUELO
Según manifestó el ingeniero Ávalos, en cuanto al impacto de tuvo el suelo en el lugar del accidente, que es de arena del Cerro Dragón, es un terreno granular que si pasa agua por ahí con gran presión va a sacar toda esa arena.
Y planteó que si hubiese sido más grande esa rotura o se haya generado hacia el lado de los edificios que hay en el lugar, “podría haberse llevado el material que cubre las fundaciones, eso podría haber sido terrible. Ya que lo que se vio es que generó un gran impacto vial y se tendrá que hacer la calle de nuevo”, enfatizo.
Ávalos explicó que ese chorro de agua salió con un caudal de 420 litros por segundo, fue muy fuerte, “el agua alcanzó una altura de 14-15 metros, haciendo el cálculo hidráulico el agua al bajar tomó una potencia de 100 kilos, es por ello el daño que provocó en los autos y en las casas. Son 100 kilos que caen sobre algo, eso es muy pesado”, afirmó.
LO QUE VIENE
Lo primero que hay que hacer, explicó el profesional es que antes de hacer cualquier arreglo en las casas, por ejemplo, se debe hacer un estudio del estado del suelo, la sanitaria ya determinó a cambiar todo el tramo, porque si está fallando la materialidad de la tubería no sirve repararlo, porque va a seguir fallando.
El ingeniero, relató que antes de que entren los dueños a sus casas deberían pedirle a la sanitaria un estudio o evaluación técnica de habitabilidad, porque “el agua al penetrar a los muros se dañan, pueden generar hongos y en las instalaciones eléctricas también se podrían haber generado problemas, porque nada puede estar mojado por dentro”, detalló.
LAS OBRAS DE REPARACIÓN
En cuanto a los plazos de los trabajos, el profesional indicó que por lo bajo deberían demorar unos 40 días tal como informo la sanitaria, y eso se debe principalmente a que la empresa debe hacer la solicitud de la tubería, porque no son tuberías que se tienen siempre en stock.
Según Ávalos, lo que la empresa sanitaria podría hacer para no retrasar las obras es conversar con alguna empresa minera, “pues conversando con algunos colegas sobre este tema esas empresas trabajan con este tipo de tuberías y se podría generar un préstamo hasta que llegue desde Santiago por ejemplo”, manifestó.
