JUAN VELARDE, EXPERTO EN TANGO: «EL RITMO DEL 2X4 ENTRÓ TARDE EN MI VIDA, PERO LLEGÓ PARA QUEDARSE»
Juan Alberto Velarde Montoya, de 68 años es un orgulloso pampino y feliz vecino iquiqueño que ha dedicado más de la mitad de su vida a bailar e interpretar el tango.
¿Cómo fue que le empezó a gustar este baile? le preguntamos a don Juan: «Mi mamá escuchaba tango y cuando era niño, ella me enseñó. Claro que ella hacía algunos pasos solamente y después dejaba de bailar conmigo».
Sin embargo la danza espectáculo entró a su visa en forma tardía: «Yo entré tarde al tango, a los 39 años. Ahí fue que me inscribí para unos cursos en el Club Alfredo de Angelis. Sin embargo no pude participar al tiro, sino que a la tercera vez que fui recién me pude integrar plenamente».
Velarde explicó que «En ese tiempo habían hartos monitores. Yo aprendí rápido. El profesor Tito López, ya fallecido, fue un gran profesor y me enseñó bastantes cosas».
En su experiencia perteneciendo al club de Tango le ha correspondido no solamente bailar, sino que también oficiar de instructor, es decir, enseñar el bello arte del baile.
Lamentablemente, y por las restricciones sanitarias no se han podido continuar con las actividades dentro del club. Don Juan nos explicó: «Por el aforo no se pueden hacer clases, menos ahora en fase 2. Incluso falleció una socia y no la pudimos velar en el club. Estamos conscientes del coronavirus hay que ser responsable, pues la mayoría de los integrantes del club somos personas mayores».
También tiene el orgullo se haber representado al club y a la ciudad en diferentes encuentros y competencias: «Viajamos a las otras ciudades en la zona norte, Arica, Calama, Antofagasta, Copiapó, Caldera y otras. El grupo es la delegación más grande que iba a todos los encuentros y competencias, siempre cerca de 40 personas».
Para finalizar, le preguntamos ¿Qué valor le da usted al Tango en su vida?, y la respuesta fue la siguiente: «Es lo que me alivió la salud mental, me evade, me hace sentir feliz, me hace sentir orgulloso y vivo. Recomiendo a todos a que se interesen por bailar, el ritmo que sea, verán que se sentirán bien».