
La Conferencia Episcopal de Chile se pronunció en contra del proyecto de ley que busca legalizar el aborto, reiterando que la vida humana es sagrada e inviolable desde su concepción hasta la muerte natural.
En un comunicado, los obispos chilenos recordaron que «un ser humano es siempre sagrado e inviolable, en cualquier situación y en cada etapa de su desarrollo», citando las palabras del Papa Francisco.
Los obispos reconocen que existen embarazos marcados por situaciones dolorosas y complejas, pero enfatizan que ningún acto de violencia puede justificarse como solución. En su lugar, llaman a cultivar una profunda empatía hacia quienes enfrentan estas difíciles circunstancias, acompañándolas en cercanía, escucha y apoyo.
La Iglesia Católica chilena también citó las palabras de San Juan Pablo II, quien señaló que el aborto es un crimen que ninguna ley humana puede pretender legitimar. Los obispos instan a las autoridades y legisladores a ejercer su responsabilidad, promoviendo una sociedad verdaderamente inclusiva, donde toda vida humana, sin excepción, sea acogida y cuidada.
Finalmente, los obispos hacen suyas las palabras del Papa León XIII, quien destacó la importancia de proteger la dignidad de cada persona, especialmente de aquellas más frágiles e indefensas. La Conferencia Episcopal de Chile llamó a custodiar la vida de quien está por nacer y a promover una cultura de vida y respeto por la dignidad humana.