EL KREMLIN SE NIEGA A CEDER ANTE LAS PRESIONES INTERNACIONALES PARA UNA TREGUA EN UCRANIA

El Kremlin rechazó este lunes los ultimátum de Kiev y sus aliados europeos para que Moscú acepte una tregua de 30 días en Ucrania. El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, declaró que «el lenguaje de las notificaciones es inaceptable para Rusia» y que Moscú desea mantener negociaciones «serias» que conduzcan a una paz duradera.
El Presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, propuso reunirse con Vladimir Putin el jueves en Estambul, pero el Kremlin no ha respondido a la oferta. Zelenski también pidió un alto al fuego «completo e incondicional» de 30 días, lo que considera una condición previa para la apertura de conversaciones de paz directas entre rusos y ucranianos en Turquía. La propuesta de Zelenski busca generar un diálogo directo entre las partes para encontrar una solución al conflicto.
El Kremlin ha mantenido una postura firme en cuanto a las negociaciones con Ucrania. Según Peskov, «no se puede hablar así a Rusia» y Moscú solo considerará negociaciones que sean «serias» y conduzcan a una paz duradera. La posición del Kremlin sugiere que Rusia no está dispuesta a ceder ante las presiones internacionales para una tregua.
China, aliado clave de Rusia, pidió un acuerdo de paz «duradero y vinculante» que sea «aceptable para todas las partes». La posición de China es significativa, ya que el país ha mantenido una relación estrecha con Rusia en el conflicto. La llamada de China a un acuerdo de paz duradero podría ser un intento de influir en la postura de Rusia y promover una solución negociada.
En el frente diplomático, las cosas se han acelerado en los últimos días. Kiev y sus aliados europeos, junto con Estados Unidos, exigieron a Rusia un alto al fuego de 30 días, amenazando con «sanciones masivas» en caso de negativa. El Presidente ruso ignoró el ultimátum, proponiendo a su vez negociaciones «directas» y «sin condiciones previas» entre Moscú y Kiev, a partir del jueves en Turquía.
Estas serían las primeras conversaciones entre rusos y ucranianos desde marzo de 2022, cuando ambas partes se reunieron en Estambul para poner fin al conflicto, sin llegar a un acuerdo. La posibilidad de nuevas conversaciones de paz ha generado expectativas y esperanzas de una solución negociada al conflicto.