
La ceremonia del Colegio Médico Iquique reunió a autoridades gremiales y profesionales para homenajear a los médicos que cumplen 50 años de trayectoria, destacando el aporte del Dr. Felipe Platero y otros especialistas reconocidos por su labor histórica en la región. La actividad incluyó discursos, saludos nacionales y una celebración que reforzó el sentido de comunidad dentro del gremio.
En la sede del Colegio Médico de Iquique, donde los muros guardan décadas de batallas silenciosas contra enfermedades, desvelos y vidas salvadas, la tarde del sábado se convirtió en una postal de gratitud y memoria. Allí, entre fotografías antiguas, aplausos emocionados y abrazos que parecían venir desde otro tiempo, el gremio celebró el Día del Médico 2025 con una ceremonia que tuvo tanto de homenaje como de viaje por medio siglo de historia sanitaria.
La jornada fue encabezada por la directiva regional, liderada por el Dr. Sergio Calcagno, quien abrió la actividad recordando que, “la medicina no se ejerce solo con conocimientos, sino con humanidad, constancia y una enorme capacidad de servir”.
Sus palabras marcaron el tono de la noche: un reconocimiento profundo a los médicos que cumplen 50 años de trayectoria profesional, medio siglo dedicado al bienestar de la comunidad iquiqueña.

Cinco décadas de vida entregadas a la salud
El salón se silenció cuando pasó al frente el Dr. Felipe Platero, único de los homenajeados presente para recibir la distinción. Su andar pausado contrastaba con la ovación que lo acompañó hasta el escenario. Allí, con la voz cargada de emoción, dejó un discurso que arrancó más de una lágrima.
“Al volver la cabeza hacia el pasado y ver el camino recorrido, no puedo menos que estar agradecido de mi familia, de mis amigos, de mis colegas, de los funcionarios del hospital y también de las clínicas y, por supuesto, de la inmensa cantidad de pacientes que confiaron en mí y que, en muchos casos, ayudé a nacer a sus hijos”, dijo, mientras los aplausos sellaban medio siglo de servicio.
Junto a él, también fueron reconocidos —aunque ausentes por motivos personales— los médicos Manuel Vargas, Ignacio Auger y Julio Brito, quienes alcanzaron el mismo hito profesional.
Un saludo desde Santiago que cruzó el desierto
La ceremonia también recibió el mensaje de la presidenta nacional del Colegio Médico de Chile, Dra. Ana María Arriagada, quien envió un saludo especial a sus colegas del norte grande. En su intervención virtual, destacó los avances del gremio en el último año, fruto del trabajo coordinado entre los consejos regionales y el nivel central, especialmente en materia de bienestar, condiciones laborales y fortalecimiento de la comunidad médica.
Gestiones que marcan el trabajo local
Durante su discurso, el presidente regional Dr. Calcagno recordó las principales gestiones impulsadas este año por el Consejo Iquique, entre ellas la recuperación y mejoras en el Club de Campo, la reducción de la cuota social, y nuevas iniciativas orientadas a proyectar el Colegio Médico hacia los próximos años. “Trabajamos para un gremio más cercano, más unido y más preparado para los desafíos que vienen”, afirmó.
Una fiesta para cerrar la noche
Como toda celebración que honra la vida, la jornada terminó con música, risas y la complicidad de los colegas reunidos. Hubo cena bailable, concursos que desataron carcajadas, un encendido tributo a Chayanne, y el cierre musical de Los Gástricos, banda infaltable en las celebraciones del gremio, que convirtió el salón en una pista llena de energía.
Entre brindis y fotografías, la noche dejó una certeza: el Día del Médico no solo recuerda la importancia del trabajo clínico, sino también el espíritu de quienes, durante medio siglo, han sido faros para miles de familias del norte de Chile.
Una celebración que no solo homenajeó carreras individuales, sino que reafirmó que la medicina es —ante todo— un acto de humanidad.









