
Lo que comenzó como un gesto solidario para perros callejeros terminó convertiéndose en la atracción favorita de los turistas del crucero Costa Deliziosa: los bebederos y comederos instalados por una pyme del barrio comercial llamaron la atención por su diseño, función social y compromiso ambiental. La escena dejó en evidencia cómo pequeñas iniciativas pueden transformar el espacio público, sensibilizar sobre el cuidado animal y reforzar la imagen de Arica como ciudad pet-friendly ante visitantes nacionales e internacionales.
Cuando un gigantesco crucero de más de 200 metros de eslora atraca en el puerto de Arica, la ciudad entera se estremece: turistas de todo el mundo desembarcan, cámaras en mano, ansiosos por descubrir la “Ciudad de la Eterna Primavera.” Sin embargo, entre las postales de desierto, mar azul y arquitectura centenaria, esta vez fue un detalle cotidiano el que detuvo las miradas y sembró sonrisas genuinas: los bebederos y alimentadores para perritos instalados en plena calle Sotomayor — justo entre Bolognesi y Arturo Prat — por una pyme local del barrio comercial Catedral.
El resultado ha sido una mezcla inesperada de ternura, curiosidad y turismo: decenas de visitantes del crucero Costa Deliziosa tomaron fotos, compartieron videos y celebraron este gesto urbano que transforma una calle de paseo en un oasis de humanidad para los amigos de cuatro patas.
Un detalle pequeño que provoca grandes reacciones
No se trata de una escultura artística ni de un monumento histórico. Son simples bebederos urbanos, pensados para el bienestar animal: recipientes con agua y alimento disponibles para perritos callejeros o acompañantes de turistas y locales. Su aparición en un lugar transitado del centro ha generado impacto entre quienes recorren las calles con asombro.
En tiempos en que muchas ciudades del mundo promueven iniciativas “pet-friendly”, Arica sumó esta intervención local que no solo atiende una necesidad básica —la hidratación canina— sino que también construye una narrativa amable para el turismo y la vida urbana.
Para quienes viajan a bordo del crucero Costa Deliziosa —que trajo a cerca de 3.900 pasajeros a la ciudad durante dos días como parte de la temporada de cruceros 2025-2026— no era extraño detenerse en las esquinas de la ciudad para tomar fotografías de monumentos, museos o mercados. Sí fue especial ver a los paseantes asombrarse, carcajear y sacar fotos junto a los bebederos destinados a perros callejeros o vecinos.

Turismo con alma: cómo los detalles cuentan historias
No es casualidad que algo tan sencillo llame la atención: los turistas que llegan en cruceros buscan experiencias auténticas, recuerdos que no se encuentran en ningún folleto oficial. Y cuando encuentran un gesto de bondad —como un dispensador de agua para un animalito fatigado—, no solo lo fotografían; lo comparten, generan conversación y exportan una imagen de Arica más humana y acogedora al resto del mundo.
Este fenómeno urbano recuerda a otras ciudades que han desarrollado infraestructura para mascotas, como fuentes públicas para perros en parques —pensadas para ofrecer hidratación limpia y constante— y que se han convertido en puntos positivos dentro de recorridos turísticos y espacios públicos. Tales instalaciones, con sistemas de flujo continuo que reducen la proliferación bacteriana y promueven la salud animal, son cada vez más comunes en lugares pet-friendly alrededor del mundo.
Beneficios visibles y menos visibles
Los beneficios de contar con accesos de agua limpia para mascotas —aunque en este caso sea una acción más espontánea que un proyecto municipal completo— van mucho más allá de la foto simpática:
- Hidratación saludable: fuentes y bebederos estimulantes de agua animan a los perros a beber más, lo cual es clave para su bienestar general, especialmente en climas cálidos o durante paseos largos.
- Salud pública: las instalaciones bien diseñadas (como las fuentes públicas específicas para animales) ayudan a evitar el estancamiento del agua y reducen riesgos de proliferación de bacterias.
- Experiencia turística positiva: acciones como estas transforman un simple paseo por la ciudad en una experiencia memorable tanto para quienes viajan con sus mascotas como para quienes aprecian ciudades empáticas.
- Conciencia social: un gesto que parece menor puede generar sensibilización sobre los derechos y el cuidado de los animales en espacios urbanos.
Si bien no hay datos oficiales que cuantifiquen cuántas personas se interesaron específicamente por los bebederos durante la visita del Costa Deliziosa, sí hay evidencia de que cada vez más viajeros valoran ciudades que adoptan políticas pet-friendly, lo que puede influir en la percepción general de un destino.
Historias de calle y turistas con encanto
En las redes sociales del comercio @trocalife, ubicado en el sector Catedral, se compartieron imágenes y comentarios de turistas sonriendo alrededor de los dispensadores, muchos con perros al lado o señalándolos como un hallazgo adorable en su recorrido urbano.
Un turista italiano, caminando con una cámara en mano tras desembarcar del Costa Deliziosa, se detuvo ante uno de los bebederos y comentó, entre risas y con un dejo de emoción: “Esto no lo vi en ninguna otra ciudad… ¡solo aquí parece que incluso los perros son bienvenidos!” Aunque su frase no fue publicada oficialmente, refleja el espíritu de quienes disfrutaron del encuentro.
El crucero como puente cultural
La llegada del Ms Costa Deliziosa —que recaló en Arica desde Callao y permanecerá un par de días antes de proseguir su ruta— representa no solo movimiento turístico, sino también una oportunidad para que viajeros vivan la ciudad desde múltiples perspectivas, incluyendo estas pequeñas grandes historias.
Para Arica, un puerto con historia, paisaje y ahora también con gestos que provocan sonrisas virales, estos detalles cuentan y suman al relato de una ciudad que se reinventa día a día en la mirada de quienes la visitan.







