Con la ejecución inminente de tronaduras controladas en el sector de Alto Chusmiza, las autoridades regionales iniciaron la coordinación logística para evitar el aislamiento de los servicios públicos que operan en el complejo fronterizo de Colchane. El proyecto forma parte del plan de mejoramiento de la Ruta 15-CH, vital para el tránsito de personas, carga y personal policial en la frontera norte del país.
La delegada presidencial de Tarapacá, Ivonne Donoso, encabezó una reunión clave junto al seremi de Obras Públicas, Juan Papic, su par de Transportes, Pedro Medalla, y el director regional de Vialidad, Rodolfo Bustos. En la cita participaron instituciones como Aduanas, SAG, Carabineros y la PDI, quienes deberán adaptar sus turnos y operaciones a los cortes temporales de tránsito programados para permitir el avance seguro de las obras.
Los trabajos aún no comienzan formalmente, pero ya se afinan detalles técnicos que dependen del tipo de terreno y la magnitud de las tronaduras. “Algunas zonas requieren intervención con explosivos por su composición rocosa, y por eso es fundamental ajustar los horarios para evitar interrupciones críticas”, explicó Donoso. La prioridad, agregó, es mantener el funcionamiento continuo de los servicios fronterizos.
Esta intervención busca elevar el estándar vial de la Ruta 15-CH, no solo para los funcionarios que trabajan en la zona, sino también para fortalecer el eje logístico y productivo de la región. En las próximas semanas se informará a la comunidad sobre los tramos y horarios específicos de intervención, en coordinación con la Inspección Fiscal y el MOP central.
