CONDUCTOR EBRIO QUEDA INHABILITADO DE POR VIDA PARA CONDUCIR VEHÍCULOS
El año 2017 fue sorprendido en dos ocasiones conduciendo en estado de ebriedad, ocasionando en una de esas fechas un choque.
A dos penas de 61 días y otra de 541 días de presidio por dos delitos de manejo en estado de ebriedad y por el ilícito de incumplir la obligación de detener la marcha, prestar la ayuda posible y dar cuenta a la autoridad, respectivamente; fue condenado un conductor que el año 2017 fue sorprendido en dos ocasiones manejando ebrio en la ciudad de Iquique, y en una de ellas además chocó un taxi.
El acusado además fue condenado a dos penas de 5 años de suspensión de la licencia de conducir y a la inhabilitación perpetua para obtener licencia para guiar vehículos motorizados.
Con la prueba presentada por la Fiscalía en el juicio oral se dio por acreditado que el 30 de septiembre de 2017, cerca de las 21:00 horas, el acusado Juan Gutiérrez Vargas conducía un vehículo marca Hyundai por calle Arturo Pérez Canto y al llegar a calle O’Higgins chocó un taxi donde viajaba una pasajera, quien producto del choque resultó con lesiones de carácter leves y el taxi con daños. Tras el impacto, el acusado se dio a la fuga hasta calle Sargento Aldea, donde finalmente se detuvo. Al llegar carabineros al lugar se percataron que aquel conducía en manifiesto estado de ebriedad, arrojando la prueba de alcoholemia que se le practicó un resultado de 2.94 gramos por mil de alcohol en la sangre.
Posteriormente, en la madrugada del 29 de octubre, el acusado fue fiscalizado por carabineros cuando conducía el mismo vehículo marca Hyundai por calle Thompson esquina con calle 21 de Mayo, momento en que se percataron que guiaba en manifiesto estado de ebriedad, arrojando su examen de alcoholemia practicado esa noche 1.89 % gramos por mil de alcohol en la sangre.
En el juicio la Fiscalía de Iquique presentó los testimonios de las víctimas del choque y de los carabineros que en ambos casos detuvieron al acusado, así como los informes de alcoholemia y prueba documental que daba cuenta que el imputado había sido condenado el año 2013 por el mismo delito.
Para cumplir las condenas, el tribunal otorgó al acusado el beneficio de la reclusión parcial nocturna domiciliaria, bajo monitoreo telemático.
