El Ministerio de la Mujer y Equidad de Género entregó un balance actualizado de los mecanismos creados para enfrentar la morosidad en el pago de pensiones de alimentos en Chile. A tres años de la entrada en vigencia del Registro Nacional de Deudores y de la posterior Ley de Responsabilidad Parental y Pago Efectivo —conocida como “Ley Papito Corazón”— las cifras revelan un cambio significativo en la capacidad del Estado para asegurar estos recursos a miles de familias.
La herramienta más reciente, que entró en operación en mayo de 2023, ha sido clave para materializar los cobros. Según datos del Poder Judicial, los tribunales de familia han ordenado el pago de más de 2,9 billones de pesos, monto que ha beneficiado a más de 322 mil familias a nivel nacional. Esta legislación permite que el dinero adeudado sea descontado directamente desde cuentas bancarias, instrumentos financieros, ahorros previsionales voluntarios e incluso, bajo ciertas condiciones, desde fondos obligatorios de pensiones.
El Registro Nacional de Deudores —vigente desde noviembre de 2022— también ha mostrado resultados relevantes. Administrado por el Registro Civil, ya suma 331.787 inscripciones, de las cuales 226.680 han sido resueltas mediante pagos o acuerdos, lo que representa una tasa de resolución del 68,32%. Actualmente permanecen vigentes 295.263 personas inscritas, de las cuales el 95,3% son hombres y el 4,7% mujeres.
Para la ministra Antonia Orellana, estas cifras confirman un avance institucional importante. “Siete de cada 10 casos se resuelven, lo que muestra que las herramientas funcionan y que el pago está llegando a los niños y niñas a quienes se les debía”, señaló en entrevista con Radio y TV Usach. La secretaria de Estado recordó que al inicio de esta administración fue necesario corregir falencias del sistema, incluyendo un problema heredado: la versión original del registro no permitía salir de él una vez inscrito, lo que dificultaba su operatividad.
Sin embargo, el balance también evidencia desafíos. Una cifra preocupante es la reincidencia: el 26,33% de quienes pagaron o acordaron su deuda volvió a ingresar al Registro, lo que según Orellana refleja un comportamiento arraigado en la cultura chilena. “Incluso el término ‘papito corazón’ se usa con connotaciones de picardía. Eso debe cambiar. Cumplir con la responsabilidad parental no es optativo”, enfatizó.
Las regiones con mayor cantidad de deudores inscritos corresponden a las zonas más pobladas del país: la Metropolitana encabeza la lista, seguida de Valparaíso y Biobío.
Con estas herramientas, el Gobierno afirma haber consolidado una institucionalidad más efectiva para enfrentar un problema histórico. No obstante, insiste en que el cambio cultural —y no solo legal— será determinante para mejorar el cumplimiento futuro de las pensiones de alimentos.
