El Cuarto Tribunal Oral en lo Penal (TOP) de Santiago, dio inicio este lunes al juicio contra Claudio Crespo, excarabinero de Fuerzas Especiales -hoy Control de Orden Público, COP-, imputado como autor de los disparos que le causaron la pérdida de visión a Gustavo Gatica durante una manifestación el 8 de noviembre de 2019, en pleno estallido social.
La Fiscalía Metropolitana Centro Norte imputa a Crespo la autoría del disparo con la escopeta antimotines y el delito de apremios ilegítimos con resultado de lesiones gravísimas. Además, pide una pena de presidio de 12 años de cárcel.
La defensa de Crespo presentará 92 testigos, por lo que se prevé un juicio extenso que puede llegar a extenderse por un año.
El fiscal Francisco Ledezma sostuvo en la audiencia que, «este punto es relevante e importante, pues no forma parte de la imputación y, por ende, de algo que debamos probar en este juicio, que el señor Crespo Guzmán haya apuntado a los ojos de Gustavo Gatica».
«Lo que se le atribuye es un acto abusivo y sin justificación, que causó lesiones graves, permanente e irreversibles en los ojos de una persona llamada Gustavo Gatica. No era necesario disparar, y menos disparar a la altura del pecho y cara de los manifestantes», añadió Ledezma.
El persecutor enfatizó, asimismo que, «así como pudo ser Gustavo Gatica el 8 de noviembre (de 2019), la persona que resultó herida pudo haber sido cualquier persona que haya estado en ese momento y en ese lugar».
Las primeras exposiciones de las partes querellantes, en tanto, estuvieron centradas principalmente en un anuncio de peritajes, que buscan comprobar el desapego al protocolo por parte de Crespo, y también las distintas lesiones oculares que se produjeron en el marco del estallido social.
HECHOS
Cabe recordar que Crespo fue detenido el 21 de agosto de 2021 por funcionarios de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI. En junio de ese año había sido desvinculado de Carabineros debido a irregularidades que habría cometido en el manejo de imágenes de su cámara corporal durante la jornada en que Gatica quedó ciego.
Los hechos investigados ocurrieron alrededor de las 18.10 horas del viernes 8 de noviembre de 2019 en la intersección de Vicuña Mackenna con Carabineros de Chile, en el centro de Santiago.
Según la Fiscalía, Crespo se parapetó en una pared y “abusando de su cargo, con la intención de castigar”, disparó una escopeta antidisturbios directamente al tercio superior del cuerpo de los manifestantes, impactando a la Gatica a una distancia de alrededor de 24,5 metros.
El joven quedó con heridas en sus dos ojos. Sufrió de trauma ocular severo y amaurosis bilateral (pérdida completa de la visión o con percepción sólo del brillo de la luz enfocada directamente en los ojos), estallido ocular en el ojo izquierdo y contusión ocular grave en el ojo derecho y hemorragia vítrea densa sin desprendimiento de retina y sin percepción de luz en el ojo derecho.
DEFENSA
El abogado defensor Pedro Orthusteguy argumentó que, «la munición marca TEC, calibre 2, nunca debió autorizarse por parte de la autoridad política para el control de orden público en Chile».
«Aquí hubo un descuido grave, que permitió el uso de una munición con bario, silicio, hierro y plomo, con velocidades de salidas transónicas y supersónicas que, por su masa, el cono de dispersión generaba largas distancias, que debieron preveer que estas municiones causarían las lesiones oculares», señaló Orthusteguy.
«Es por ese motivo que, dos días después de los hechos de la acusación, el alto mando acotó el uso de las escopetas antidisturbios con munición no letal, sólo cuando exista riesgo de vida de Carabineros o civiles», enfatizó.
Claudio Crespo renunció a su derecho a guardar silencio y, se espera que mañana declare ante el tribunal. Tras concluir la primera jornada de la audiencia, el otrora policía aseguró que no fue él quien disparó a Gustavo Gatica.